Son 14 los fines de semana -ahora 20 por el verano y los agentes en prácticas- y siete cada noche. Su trabajo comienza cuando se pone el sol y se prolonga hasta la madrugada. Son los 'centauros', un cuerpo especial de la Policía Nacional, una figura que fue solicitada por la Comisaría de Ourense después del éxito que los agentes alcanzaron en el control de la noche de las grandes ciudades, como Madrid, Tenerife o Barcelona.
El nombre completo es Grupo Operativo de Respuesta (GOR) pero se apodaron 'centauros' para pasar, curiosamente, más desapercibidos. Comenzaron a actuar en la noche ourensana en junio del año 2005.
Su historia aún es, pues, corto, pero en ese tiempo han identificado a 5.000 personas y detenido a más de 400 por causas tan variadas como tráfico de drogas o de armas, agresiones sexuales, maltrato doméstico, robos, falsificación de identidades, daños contra vehículos o peleas callejeras.
Ya han intervenido todo tipo de armas y objetos destinados a causar lesiones. Por eso, cuando salen, llevan sus manos protegidas con guantes especiales, para evitar resultar heridos durante los servicios.
Además, instruyeron ante la Subdelegación del Gobierno en Ourense más de mil actas por consumo de drogas en la calle y espacios públicos y por todo tipo de incidencias, aunque no estén tipificadas como delito.
El 'peinado' de la noche ourensana les ha llevado, además, a detener recientemente a un hombre de 36 años, de origen rumano, que estaba siendo buscado para responder de seis agresiones sexuales, arrestaron a jóvenes que robaban y destrozaban coches estacionados en Outariz y pillaron in fraganti a otros que lanzaban piedras a los vehículos que transitaban por la N-120, siendo una de las víctimas un coche de la Policía Nacional.
El comisario, satisfecho
Es el balance, que el comisario de Ourense, Angel Barrera, considera muy 'satisfactorio', de la eficiencia de un cuerpo especial que cada noche vigila el casco urbano, teniendo en cuenta que Ourense no es una gran ciudad que origine conflictos nocturnos. 'Somos conocedores de que la ciudad está muy satisfecha con el trabajo de estos policías, precisa Barrera.
Su historia aún es, pues, corto, pero en ese tiempo han identificado a 5.000 personas y detenido a más de 400 por causas tan variadas como tráfico de drogas o de armas, agresiones sexuales, maltrato doméstico, robos, falsificación de identidades, daños contra vehículos o peleas callejeras.
Ya han intervenido todo tipo de armas y objetos destinados a causar lesiones. Por eso, cuando salen, llevan sus manos protegidas con guantes especiales, para evitar resultar heridos durante los servicios.
Además, instruyeron ante la Subdelegación del Gobierno en Ourense más de mil actas por consumo de drogas en la calle y espacios públicos y por todo tipo de incidencias, aunque no estén tipificadas como delito.
El 'peinado' de la noche ourensana les ha llevado, además, a detener recientemente a un hombre de 36 años, de origen rumano, que estaba siendo buscado para responder de seis agresiones sexuales, arrestaron a jóvenes que robaban y destrozaban coches estacionados en Outariz y pillaron in fraganti a otros que lanzaban piedras a los vehículos que transitaban por la N-120, siendo una de las víctimas un coche de la Policía Nacional.
El comisario, satisfecho
Es el balance, que el comisario de Ourense, Angel Barrera, considera muy 'satisfactorio', de la eficiencia de un cuerpo especial que cada noche vigila el casco urbano, teniendo en cuenta que Ourense no es una gran ciudad que origine conflictos nocturnos. 'Somos conocedores de que la ciudad está muy satisfecha con el trabajo de estos policías, precisa Barrera.
