Condenado un varón en Ourense por coaccionar a su expareja: pretendía que lo llamase

TRIBUNALES

El condenado de Ourense le llegó a decir a la víctima quehabía estado en el pueblo con su padre

Publicado: 21 sep 2024 - 08:00 Actualizado: 21 sep 2024 - 08:09

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Un hombre de Ourense ha sido condenado a la pena de 33 días de trabajos a la comunidad por enviar varios whatsapps a su pareja diciéndole que debía llamarlo en una hora y que había estado en el pueblo con su padre. Según declaró la víctima, tras finalizar la relación con el encausado lo bloqueó en el teléfono, pero este comenzó a enviarle mensajes desde un número oculto y diversas cuentas falsas de Instagram.

En su testimonio, indicó que en esos mensajes, enviados a finales de agosto de 2024, le daba una hora para que lo llamase por teléfono e incluso llegó a decirle que había ido a casa de su padre el día anterior. Por su parte, el padre de la víctima contó que el acusado acudió a su domicilio golpeando la puerta. Al salir a la ventana, el procesado le exigió que llamase a su hija y que, si no lo hacía, se atuviera a las consecuencias.

También declaró en el juicio la compañera de piso del acusado, quien señaló que este le pidió usar su cuenta de Instagram para hablar con la denunciante. “Tienes una hora para llamarme y hablar conmigo si no allá tú hay te lo dejo”, decía literalmente uno de los mensajes del denunciado. La jueza señala en la sentencia que “como podrá apreciarse, no le dice en ningún momento a su expareja que si puede llamarle por teléfono, sino que le dice de manera imperativa que tiene una hora para llamarlo”.

Desasosiego e inquietud

Además, la magistrada considera que “completa ese mensaje con una expresión apta para generar inquietud y desasosiego al decirle que si no lo hace, allá ella y que ahí lo deja”. En este sentido, apunta a que “ese comportamiento coactivo y amenazante se vio también reforzado con el hecho de aludir el acusado en otro de los mensajes remitidos a la denunciante al encuentro que tuvo con su padre”. Por todo ello,el hombre fue condenado a 33 días de trabajos en beneficio de la comunidad como autor de un delito de coacciones y la prohibición de aproximarse a una distancia inferior a 300 metros de su expareja y de contactar con ella durante un año y seis meses.

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