El tramo de la autovía A-52 entre los municipios de Sandiás y Riós apenas registraba a las 12,30 horas de este miércoles circulación. Sin embargo, la Guardia Civil de Tráfico mantenía desplegados todos sus efectivos para reducir aún más los desplazamientos e impedir la circulación a todos aquellos conductores que cogieron el coche sin causa justificada.
A los controles también se sumaban a esa hora varios efectivos de las policías locales de Xinzo y Verín, acompañados de miembros del Ejército de Tierra. "Hoy -por ayer- de no estar viviendo la actual situación, estaríamos en plena operación salida de Semana Santa. Vigilando la circulación para evitar accidentes", recordaba uno de los agentes.
El descenso de la intensidad circulatoria no está siendo excusa para que los agentes, sobre todo de Tráfico bajen la vigilancia. Al contrario, desde la Comandancia ourensana aseguraban este miércoles que se va incrementar durante los próximos días, sobre todo de madrugada, ante la sospecha de que habrá conductores que se salten la obligación de permanecer en sus domicilios y se desplacen a segundas residencias en la costa o en el rural.
Las distintas patrullas tiene previsto establecer controles integrales, sobre todo en la autovía A-52, en los que, además de fiscalizar los motivos del desplazamiento, verificarán la identidad de los conductores y revisaran el interior de los vehículos.