El presunto homicida del gerente del Bar Novo admite que mató al hostelero tras una pelea

Un vídeo recoge el momento de la detención donde puede observarse cómo es abordado en su vehículo en plena carretera, una Citroën Berlingo

La Policía Nacional detuvo el pasado lunes al presunto autor del homicidio del gerente del bar Novo, Evaristo Morín, en el casco vello de la Ourense. A primera hora de la tarde ingresaba en prisión tras pasar a disposición judicial y admitir ante la Policía primero y después ante el juez que mató al hostelero tras una pelea con el casco de una botella. Se trata de un hombre de 38 años, vecino de Celanova, y del que no constan antecedentes penales previos.

Un vídeo de la Policía Nacional muestra el momento de la detención, cuando los agentes abordan al conductor de una Citroën Berlingo blanca en la que viajaba el detenido que este jueves pasó a disposición judicial. Culminan así más de tres meses de investigación. En las horas posteriores al arresto, entre la tarde del 25 y la mañana del 26, los agentes efectuaron cinco registros domiciliarios y el de un coche  en los que se interviene ropa del presunto autor, un teléfono móvil, tres tarjetas SIM, una pistola de fogueo, una factura de la pistola a nombre de otro varón, una caja de munición de 9mm con 23 cartuchos y un cargador. 

En la tarde del día 25 y mañana del 26 se realizó el registro del vehículo y 5 registros domiciliarios en los que se intervino ropa del presunto autor, un teléfono móvil, tres tarjetas sim, una pistola de fogueo, una factura de la pistola a nombre de otro varón, una caja de munición de 9 milímetros con 23 cartuchos y un cargador.

VÍDEO: así fue la detención del presunto homicida del gerente del bar Novo

Investigación

Los hechos se remontan al 5 de febrero, sobre las 20.27 horas, cuando se recibe una llamada en el 091 que alerta del hallazgo de un cuerpo con heridas de arma blanca en el interior del local regentado por Evaristo Morín. Los agentes que se personaron en el local, hallaron el cuerpo sin vida del gerente detrás de la barra, con un corte en el cuello y rastros de sangre que pudieran corresponder con una muerte violenta. Durante el registro de la vivienda de la víctima se intervienen 105 gramos de cocaína y 12.685 euros, además de una tablet y una libreta con anotaciones. En esos primeros momentos, la investigación se orientó hacia el tráfico de drogas, como ya publicó este periódico. La Policía Nacional mestá convencida de que Morín Machado seguía dedicándose a la venta de estupefacientes a pequeña escala. 

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