Especulación y cambios climáticos disparan el precio del café en Ourense

SUBIDA DE PRECIOS

Los tostaderos ourensanos experimentaron un incremento del 70% del precio en origen

Un saco de granos de café de uno de los tostaderos de la ciudad.. Foto: Sandra Iglesias
Un saco de granos de café de uno de los tostaderos de la ciudad.. Foto: Sandra Iglesias

En el año 2007, el entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, fue preguntado en un espacio televisivo por el precio de un café, situándolo entonces erróneamente en 80 céntimos. Diecisiete años después, el precio de esa misma taza se está acercando a los dos euros, según advierten los importadores de esta popular infusión, principalmente por la subida de los precios del transporte, la entrada de fondos de inversión y una futura normativa europea que limitaría la entrada de determinados productos que hayan sido cultivados en terreno deforestado.

"El incremento del consumo mundial y del precio de los transportes está pesando mucho en el precio final"

La subida de precios “se ha notado y se sigue notando”, afirma el gerente de Cafés Lisboa, Francisco Corcobado. “El mercado del café ha experimentado desde hace más de un año una subida del 70%. A día de hoy el café está en máximos históricos”, continúa Corcobado. El cambio climático está afectando a los países productores por las sequías y fuertes lluvias que están padeciendo, por ejemplo, en Brasil, lo que provoca baja producción. También hay poca oferta y mucha demanda”, remata el gerente. Una perspectiva que comparte Marco Antonio Vázquez desde Las Antillas-Campos, el segundo tostadero de café operativo en Ourense. “Importamos principalmente desde Brasil y Colombia, con algunas variedades centroamericanas. La variedad ‘robusta’ -más dulce y con notas afrutadas- la traemos de la India. En las zonas tropicales, el principal problema es el transporte, pues las rutas marítimas se han complicado mucho”, explica Vázquez, quien cree que el coste de la taza llegará a los dos euros.

Otras de las grandes marcas gallegas, Cafés Candelas, vive en estos momentos una situación similar. “Importamos grano de Brasil, Colombia u Honduras”, cuenta su jefe de compras, Andrés Alonso. “El incremento del consumo mundial y del precio de los transportes está pesando mucho en el precio final. Y luego tenemos que tener en cuenta que venimos de un momento de sobreventa”, añade Alonso, “donde el principal distribuidor mundial vendió dos millones de sacos más de los que se han recolectado”. Como consecuencia, “desde septiembre de 2023 hasta estos días, el precio del café verde ha subido en torno a un 70%”, calcula Andrés Alonso. Francisco Corcobado añade que “lo peor de esta situación es que no tiene pinta de que vaya a pasar a corto plazo”, lo que implicará, a su juicio, “que se siga repercutiendo al consumidor final. Probablemente, antes de final de año haya que volver a hacer tarifas nuevas”.

Fondos de inversión

Como tantos otros productos, el café no ha podido evitar la llegada de los fondos de inversión a su mercado, una llegada que ha repercutido también en el precio y disponibilidad del producto. Algo que también nota en Cafés Candelas Andrés Alonso. “Es imposible que el precio del café no suba”, explica, “el kilo en origen está muchísimo más alto que los dos euros”.

Importaciones pendientes de la legislación europea

A la situación del mercado hay que sumar una futura normativa europea que iba a entrar en vigor a comienzos de 2025, que finalmente fue aplazada, donde se prohibía la importación de productos alimentarios que hayan sido cultivados en suelo deforestado. “Será un cambio grande”, garantiza Andrés Alonso, jefe de compras de Cafés Candelas. “Nosotros trabajamos con consultoras y plataformas que nos garantizan que el origen del producto es correcto, pero la normativa incrementará los precios”, asegura Alonso.

Una perspectiva que comparte Francisco Corcobado desde Cafés Lisboa. “(La futura normativa) Está provocando que muchos estén comprando ahora, ya que una vez que entre en vigor esta legislación habrá que demostrar que ese café no proviene de zonas desforestadas”, relata.

“A mayores del café hay otras materias primas que se verán también afectadas, lo que hará que los precios sigan subiendo”, concluye el gerente de la empresa cafetera ourensana sita en O Vinteún.

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