El OUFF volvió a confiar en el cineasta Ángel de la Cruz para dirigir la gala inaugural del festival. Lluvia de estrellas. Así tituló el espectáculo de premios, música y, evidentemente, cine, que dieron el pistoletazo de salida a 10 días de buenas películas. Las estrellas no tardaron en desfilar por el escenario del Auditorio, abarrotado. Y no es fácil: son casi 1.000 butacas. Pero el público ourensano volvió a confiar. La Real Banda de Gaitas fue la encargada de abrir el espectáculo.
Sergio Pazos y Ledicia Sola condujeron una gala en la que hubo tiempo para reivindicaciones, pero también emociones. A la música se sumaron las actuaciones de Mercedes Peón.
El primer galardón fue el Premio AISGE para una de las actrices más reconocidas en Galicia: Luisa Merelas. Al borde del llanto bromeó con que en su trayectoria “tocoume ser a nai de tódolos actores galegos”.
La cineasta Olga Osorio fue la siguiente homenajeada, con el premio Chano Piñeiro. Osorio tiró de “chuleta” para contar que “para aquela nena de Lugo que fun, soñar con ser cineasta era como facerse astronauta”.
El tercer galardón, el Premio OUFF Ourense, fue para otra actriz reconocida en Galicia: Mariana Carballal. El aplauso fue muy sonado, quizás por que es ourensana. De sus raíces presumió y de la “semente” de valores que puso en ella su familia. Y ella dejó su mensaje entre lágrimas: “Adico ao meu alumnado porque é o futuro”.
En la recta final de la gala se entregó un premio homenaje a Manuel Baltar, ya que fue en su época de presidente de la Diputación cuando se rescató el OUFF. Bromeó con que “xa non mando nada que me puxeron mal o apelido” y animó a seguir haciendo el festival.
El premio Especial OUFF lo recogió el director Manuel Gutiérrez Aragón, que se confesó testigo de que “el cine gallego ha dado un gran salto y Ourense es su capital”.
El último premiado en subir al escenario a por su Calpurnia de Honra Internacional fue Arturo Ripstein, considerado el mejor director mexicano contemporáneo. Riptstein se metió al público en el bolsillo y él -literalmente- se quitó el sombrero y leyó unas notas sobre su película “Profundo carmesí”. La cinta se exhibe en el festival, que anima a los ourensanos a las salas un año más.