El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, ha puesto en valor la inversión para mejorar la carretera N-540, que une Ourense con Lugo. Así lo ha destacado durante una visita al Concello lucense de Taboada para anunciar la adjudicación por 11 millones de la rehabilitación del firme, clave para la movilidad de la zona.
El vial principal que une las dos provincias del interior ha sido objeto de quejas por parte de los usuarios, empresas y autoridades de las zonas por las que pasa, debido a que su mantenimiento es malo. Pedro Blanco ha destacado que con esta apuesta se corrige progresivamente el déficit que arrastra desde hace muchos años la red de carreteras en Lugo por “la dejadez y el abandono” de anteriores administraciones. Frente a ello, ha destacado que solo en conservación y mantenimiento “se han invertido más de 214 millones desde el año 2019”.
Sin embargo, el PP de Lugo considera insuficiente el anuncio de las obras de rehabilitación del firme al asegurar que se dilata tres años la finalización de unas actuaciones que deberían ser urgentes. Los populares señalan que el anuncio dilata tres años la finalización de las actuaciones toda vez que el plazo de ejecución es de 38 meses desde su inicio, previsto para octubre de 2024.
