La ministra de Transción Ecológica, Teresa Ribera, avanzó ayer que cambiará el artículo 55 de la Ley de Aguas para hacer más restrictivos los vaciados de embalses como los sufridos en la provincia estas semanas, al tiempo que señaló a las concesionarias de hidroeléctricas, como Iberdrola, atribuyéndoles un intento de lucro detrás de estas prácticas. Para ello, puso como ejemplo que el 65% de las horas de la tarifa de la luz en el mercado mayorista en junio, el 64% en julio y el 59% en agosto se fijaron por el precio de la energía hidroeléctrica, pese a que usa un coste bajo (el agua) y tiene concesiones amortizadas en muchos casos. PAra ello, esgrimió los datos de la OMIE (Operador del Mercado Ibérico de Energía).
Este dato desvelado por la ministra supone que más del 60% de las horas del precio de la luz, que encadena récords este verano, se han propiciado en base a la hidroeléctrica, que, al contrario que gas o nuclear, tienen menos gastos para las generadoras, al no necesitar combustible. Esto desmontaría la teoría defendida por Iberdrola, que aseguraba estar produciendo un vaciado en presas con el objetivo de lograr abaratar el precio de la electricidad.
Y es que ha sido la generación de hidroeléctrica la energía más cara y la que ha marcado el precio en el mercado mayorista. Como ejemplo, hoy, cuando se prevé nuevo récord histórico, marcará el precio en 17 de las 24 horas del día.
"Ninguna empatía social"
Ribera acusó a las concesionarias de centrales de no mostrar “ninguna empatía social”. Quieren, dijo, “interiorizar el coste de oportunidad” en un contexto de escalada de precios con una “escandalosa” reducción de caudales, que, aún así, podría tener cobertura legal, por lo que avanzó que reformará el artículo 55 de la Ley de Aguas para “tener orden” y evitar que se repitan estos eventos denunciados por alcaldes, vecinos y ecologistas.
Feijóo: “No he visto algo así en 12 años de presidente”
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, fue muy duro con el Gobierno en relación la vaciado de embalses en la cuenca Miño-Sil, que considera una “irresponsabilidad”, por el riesgo ambiental que genera, tanto a la fauna y flora como por porducirse en plena temporada de incendios, que suelen golpear con más dureza en los meses de septiembre y octubre. “Nos parece un acto de una enorme irresponsailidad de trascendencia ecológica que Galicia no merece, se cumplan o no los requisitos mínimos de la confederación. No he visto una cosa así en 12 años de presidente. Es una irresponsabilidad que algunos embalses lleven menos agua que la cuenca del Júcar, además, cuando algunos se usan de suministro para apagar fuegos forestales en un 15 o 20%”.
