El buen tiempo primaveral facilitó la masiva afluencia de visitantes, que llenaron las calles, los recintos termales y las villas de más interés turístico
Quizás no sea Ourense una de las ciudades españolas donde más se vive la Semana Santa, pero tampoco es el turismo religioso el único protagonista en estas fechas. Sea como sea, la hostelería ourensana, tanto en la ciudad como en algunos puntos de interés de la provincia, ha colgado el cartel de "completo" desde la noche del miércoles y está previsto que así sea hasta la jornada del domingo.
Además de tratarse de días no laborables hay otro factor de igual, o incluso mayor, importancia: el tiempo. El cielo despejado y las agradables temperaturas primaverales han hecho que un gran número de hoteles, hostales y pensiones, también paradores, albergues, casas rurales y balnearios, cumpliesen con sus expectativas del 100% de la ocupación.
Así, y a modo de ejemplo, el hotel NH de la ciudad, completo ayer, prevé la llegada de numerosos grupos estos días. El hotel Princess también ha cumplido con sus expectativas y cuenta con la ocupación plena de las habitaciones. El hotel San Martín dará alojamiento a numerosos turistas que pasarán la Semana Santa, o parte de ella, en la ciudad. El Grelo Hostel, un albergue de reciente apertura en el centro de la ciudad, contó con el 90% de ocupación durante las dos últimas noches. Asimismo, un numeroso grupo de vallisoletanos aficionados al senderismo llenará el hotel Zarampallo hasta el domingo, mientras que el Parador de Santo Estevo, en Nogueira de Ramuín, también está completo, gracias, esencialmente, a madrileños que acudieron a relajarse en la Ribeira Sacra, según indicaron en el recinto.
Así como la provincia ofrece una amplia variedad de posibilidades, el perfil de los huéspedes alojados en los establecimientos hoteleros es también muy diverso y buscan diferentes atractivos. La mayor parte de los turistas proceden de otras provincias de España, aunque también hay hueco para aquellos extranjeros que, por diferentes motivos, visitan por primera vez la ciudad de As Burgas y sus alrededores. Y hay quien repite.
El colectivo más abundante son los grupos de amigos, aunque son también numerosas las familias que aprovechan las "minivacaciones". Eso sí, sea cual sea la procedencia y la compañía, todos conviven estos días en cualquiera de los rincones turísticos.
En cuanto a los destinos, la Ribeira Sacra y las rutas termales son los principales motivos por los que los visitantes escogieron Ourense para esta Semana Santa, seguidos del Camino de Santiago, la gastronomía o ciertos núcleos urbanos y rurales, como la propia capital, Allariz o Celanova. El denominado "turismo de salud", focalizado en los balnearios, es otro de los platos fuertes de la provincia. De este modo, según ha informado la Asociación de Balnearios de Galicia, la ocupación media es del 85% (con una estimación del 100% en varios establecimientos), lo que beneficiará especialmente a los balnearios de Laias, Lobios o Baños de Molgas. Por último, Ourense se considera como una "puerta a la costa", conviertiéndose éste en otro de los motivos de la masiva afluencia de visitantes a la provincia procedentes del interior de la Península.
Y no se trata solo de datos, sino de hechos. Las cafeterías ponen las sillas "de reserva" para sus clientes, las termas están repletas, el Casco Vello se ha convertido en un desfile de cámaras fotográficas y los turistas para el "trenecito" a Outariz se acumulan bajo los soportales de la Praza Maior. Junto a ello, la apertura del Claustro de San Francisco o del Centro de Interpretación de As Burgas, permitió a muchos disfrutar de los monumentos y de la historia de la ciudad.
