La Ciudad de los Muchachos quiere volver a ser un polo cultural
La Asociación Cultural Padre Silva da un nuevo impulso al proyecto de recuperación del espacio socio-educativo Benposta-Ciudad de los Muchachos. La junta directiva acaba de renovarse para continuar con la revitalización del Circo de los Muchachos, una experiencia pedagógica que sitúo a Ourense en el mapa. El empresario ourensano Bartolomé Pidal -que fue uno de esos muchachos- continúa como presidente de la asociación. Le acompañarán Antonio Rodríguez como vicepresidente, Juan Andrés Díaz como secretario y Ángel Ferreira como tesorero.
“Es un nuevo paso para redimensionar y profesionalizar la agrupación sociocultural, con el objetivo de desarrollar un amplio programa estratégico de acciones”, explican desde el colectivo que nació, precisamente, con el objetivo de reactivar el legado de Benposta. Entre las actividades, contemplan la alianza internacional con otras entidades herederas de Benposta. De hecho, el proyecto ourensano tuvo sus réplicas por el mundo: hay “Benpostas” en países como Venezuela, Nicaragua o Colombia que nacieron para copiar ese modelo educativo en el que el poder reside en los niños.
La asociación cultural Padre Silva -que lleva el nombre del jesuíta ourensano que fundó el proyecto- prevé una programación anual “ambiciosa” con la organización de congresos y simposios. Además, realizarán acciones de cooperación en favor de menores en situación de vulnerabilidad de Europa y Latinoamérica.
La revitalización del proyecto de Benposta es el objetivo principal de la Asociación Cultural Padre Silva, que se constituyó como una plataforma ciudadana con la finalidad de promover la reactivación de este histórico ecosistema social y artístico organizando y fomentando diferentes actividades culturales, educativas, formativas, artísticas y deportivas. El colectivo prevé poner en valor los recursos y las instalaciones de Benposta, para mantener viva la memoria de la Ciudad de los Muchachos. “Queremos conseguir que el proyecto no se reduzca solo a un recuerdo de lo que en su día fue la Ciudad de los Muchachos, un espacio socio-educativo de integración y formación que dio la vuelta al mundo”, apuntan desde la organización. Subrayan que Benposta “abrió oportunidades a muchos jóvenes”.
