La lluvia no descargó este domingo con tanta insistencia como en las jornadas del viernes y el sábado, pero los cauces del río Miño, Sil y Arnoia continúan creciendo. En el caso del primero, los responsables del embalse de Velle abrieron este domingo parte de las compuertas para liberar agua, 671,65 metros cúbicos por segundo, 65 metros cúbicos más que el día anterior. La crecida, al igual que en días anteriores, mantiene anegadas las termas públicas de A Chavasqueira y Muíño da Veiga.
La presa de Velle está al 85% de su capacidad, pero el agua embalsada aún es mucho más en Castrelo de Miño y Frieira (Padrenda). Estos dos últimos embalses están al 95% de su capacidad, según el organismo de cuenca. Otros años, la media era del 75%.
La Confederación Hidrográfica Miño-Sil mantiene el aviso por posibles desbordamientos, una medida que también afecta a los ríos Sil, a su paso por León y Valdeorras, y el Arnoia, en Baños de Molgas. Este último arrastraba ayer un caudal de 16,44 metros cúbicos de agua por segundo, dos menos que en la jornada del sábado. Aún así, el agua anegaba parte del área de recreo y caminos vecinales. El que menos agua lleva es el Limia. El embalse de As Conchas está al 26% de su capacidad.
