Lucha contra el coronavirus

Coronavirus en Ourense | Los mayores de 80 se protegen: "Non doe nada a vacina"

OURENSE 22/02/2021.- Campaña de vacunación en Centro de Saúde de A Ponte de mayores de 80 años. José Paz
photo_camera La pontina Mercedes Jácome recibe la primera dosis de la vacuna contra el covid (JOSÉ PAZ).
En torno a 800 ourensanos estrenaron la campaña específica para población de más edad

La provincia avanza en la campaña de inmunización contra el covid con la protección de los más de 32.000 mayores de 80 años censados. En torno a 800 ourensanos recibieron ayer la primera dosis de Pfizer/BioNTech en 12 de los 20 puntos de vacunación del área sanitaria. "Queremos empezar canto antes para rematar canto antes", asegura Josefa Rodríguez Araújo, subdirectora de Enfermería de Atención Primaria y coordinadora de la campaña.

Hoy continúa la campaña entre los mayores, con un millar de pacientes citados, y en paralelo arranca la inmunización del personal docente de centros educativos públicos, con la vacunación de 340 profesionales. El Sergas prevé administrar esta semana la primera dosis a unos 5.400 ourensanos de más de 80 años, así como a 3.339 docentes. "O ritmo das próximas semanas irá en función das vacinas que cheguen. Para esta semana contabamos con 4.400 dosis de Pfizer e a última hora avisaron de que teriamos un millar máis, así que huobo que reorganizar", explica Rodríguez Araújo.

La central de llamadas del Sergas continúa con la citación de los mayores de 80 años, que serán contactados por teléfono. Los profesionales docentes, sin embargo, son avisados mediante un SMS a su teléfono móvil. Ayer, la CIG-Ensino criticaba la "falta de información" sobre el inicio de la vacunación entre profesores: "É unha nova mostra de desorganización da Xunta".

"Non me da medo pincharme"

"Coa vacina posta, pouco e pouco, pódese empezar a ter unha vida normal. Ou polo menos, un pouco", decía ayer Mercedes Jácome, después de recibir la inyección. La mujer, vecina de A Ponte, explica que, desde el inicio de la pandemia, ya no ha vuelto a juntarse con su hijo los domingos: "El ven todos os días, pero coa máscara posta, claro. Os outros fillos viven fóra, e tampouco lles é fácil vir...". El dolor del pinchazo, mínimo: "Xa ves que non me da medo, esta semana xa teño cita coa enfermeira para pincharme tamén na barriga, para os ósos". 

Aunque nunca se había vacunado de la gripe, a sus 84 años, la situación sanitaria no le dio otra opción: "Este ano pasado xa me dixo o fillo que tiña que protexerme con todo o que estaba pasando. É o que toca". 

Marina Boan y su madre, Concepción Iglesias, tampoco tuvieron dudas. "Nos xa tiñamos moi claro que había que vacinalos, tanto ela como o meu pai son persoas con moitas complicacións. Ata o de agora, gracias a Dios, non se contaxiaron, aínda que eu si me contaxiei", explica Boan. "O pinchazo doeu, pero agora xa non", decía Iglesias poco después de la inyección. La vacuna supondrá un alivio para la familia, que podrá recuperar parte de la normalidad. "Dende que todo empezou temos moito coidado, sempre coas distancias e coas máscaras. Este é un primeiro paso, pero é moi importante", asegura Boan.

Te puede interesar