El gobierno autonómico añade ahora la posibilidad de que también exista una colonia de murciélagos
Las colonias de vencejos anidadas en el Puente Viejo ya no peligrarán con las obras que se están realizando en el monumento, después de que la Consellería de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria garantizara la salvaguardia de las especies protegidas que viven en él mientras se continúe con las labores de conservación de este bien cultural.
La voz de alarma la daba el mes pasado la Sociedad Española de Ornitología SEO BirdLife, que criticaba que las obras de la Xunta en el Puente Romano estaban poniendo en peligro la nidificación de dos especies de pájaros protegidos; el vencejo común y el vencejo pálido.
El gobierno autonómico añade ahora la posibilidad de que también exista una colonia de murciélagos, por lo que tras una reunión con varios colectivos ecologistas y, dado que las especies anidadas son completamente inofensivas para la conservación del puente, decidieron compaginar la conservación medioambiental con trabajo en el puente, que mantendrá los plazos previstos inicialmente.
A partir de ahora las obras en el monumento contarán con la participación de un biólogo especialista en aves y fauna, que se incorporará al equipo de control y seguimiento de los trabajos. El profesional realizará un estudio de los ámbitos de actuación para comprobar y determinar si se está afectando a los nidos y adaptar así los trabajos a las necesidades de estas aves en periodo de nidificación.
Una de las medidas que se aplicará será colocar nidos artificiales que no generan ningún riesgo, son compatibles con las obras y no podrán ser empleados por pájaros más grandes que podrían suponer un peligro real para el puente.
Con respecto a la posible colonia de murciélagos en una antigua tubería que estaba previsto desmontar, se buscarían soluciones constructivas específicas que garanticen su permanencia.
En la reunión, estuvieron presentes, junto con las agrupaciones ecologistas, técnicos da Dirección Xeral de Conservación da Natureza, de la dirección de las obras, de la empresa adjudicataria y de la propia Dirección Xeral do Patrimonio Cultural.
