El futuro del título de Ingeniería Agraria, uno de los que se ofertan en la Facultad de Ciencias de Ourense, pasa por su remodelación. Hace tiempo que la UVigo busca alternativas a la pérdida de alumnado, a pesar de la alta calidad de la docencia e investigación demostrada en este título. La solución pasa por las exigencias de la Xunta, que tiende a promover grados interuniversitarios -esto es, compartidos en varias facultades de incluso universidades diferentes-. Este plan se sigue para evitar los grados duplicados -en Galicia esta tendencia es elevada y palpable en “clásicos” como ADE o Enfermería, “repetidos” en varios centros gallegos-. Según fuentes de la UVigo, la Consellería de Educación habría puesto sobre la mesa la idea de que Ingeniería Agraria, en Ourense, se transforme en un título interuniversitario con Ingeniería Agrícola, que se imparte en Lugo, un campus perteneciente a la Universidad de Santiago.
El Progreso de Lugo adelantó ayer el “malestar” generado en la comunidad universitaria lucense por esta decisión, una reforma que no sería definitiva, pero sí se encuentra avanzada. La misma incomodidad se traslada desde Ourense, donde ya dan por hecho que el grado será interuniversitario dentro de dos cursos, en el 2025-2026. Según ha podido saber este periódico, a finales de este mes hay una reunión programada para iniciar acuerdos. Los títulos, aunque son similares, no siguen el mismo plan de estudios. Hay asignaturas diferentes y la docencia compartida implicaría que el alumnado ourensano y lucense se matricule en una y otra universidad. Los equipos deberían decidir qué cursos se imparten en cada campus o, por ejemplo, si hay un liderazgo de Ourense o de Lugo.
“Es pronto todavía, ahora hay que hablar de organización y de planes de estudio”, señala Pedro Araújo, decano de Ciencias. Con todo, Araújo admite que la decisión de compartir el grado “no es la más adecuada y no creo que sea beneficioso”.
“No es forma de potenciar los campus periféricos”
Desde la Facultad de Ciencias recuerdan que Agraria es puntera en Galicia. Son conscientes del descenso de matrícula -según los últimos datos hay 30 universitarios en primer curso, cuando se ofrecen 45 plazas-. Sin embargo, aunque la matrícula no se cubre, de un curso a otro se aumentaron 19 alumnos, pasando de los 11 inscritos en 2023 a los 30 actuales. En palabras del decano, esta evolución es “coyuntural, sucede en toda España, pero incluso se está notando un repunte”. Prefiere mantener un tono optimista y recuerda que los grados compartidos no excluyen los planes que tienen en Ourense de impulsar dobles grados. Estas titulaciones simultáneas que proponen como solución a la pérdida de matrícula tienen un gran reclamo: “Un alumno podría graduarse en dos carreras en seis años o menos”. “Vamos a tratar de mantener esos dobles grados”, añade Araújo. Eso sí, recuerda: “Esta no es la forma de potenciar los campus periféricos”.
