El área sanitaria de Ourense, Verín y O Barco sumó ayer nueve positivos de coronavirus, uno de ellos ingresado en el CHUO. Son 78 los casos activos en la provincia según el último parte del Sergas. Siete de las personas afectadas pertenecen a dos nuevos brotes en la provincia, uno en O Carballiño con cuatro casos importados de la misma familia y otro no adscrito–con residencia en varios concellos–que afecta a tres personas. Los pacientes de ambos brotes están en situación de aislamiento domiciliario, a seguimiento sanitario. Sanidade continúa el rastreo de posibles contactos estrechos y, según los últimos datos, se han realizado 206 PCR en la provincia respecto al día anterior. La buena noticia son tres altas nuevas en el área sanitaria de Ourense.
Los ingresos hospitalarios en el CHUO ya son tres, con el nuevo caso importado detectado en las últimas 24 horas. Se trata de un hombre de 42 años, vecino de Ourense. La UCI covid, sigue vacía.
Los dos nuevos brotes detectados implican que ya son 13 los que se mantienen activos en la provincia. En el caso del de O Carballiño, son una mujer de 42 años, dos jóvenes de 22 y 18 años y una jóven de 16 años. El otro brote, no adscrito a ningún concello en concreto, afecta a una mujer de 48 años y a otras dos del 46 y 35.Todas son del mismo núcleo familiar, pero con residencia en varios concellos.
Desde el inicio de la pandemia se han notificado 2.116 casos en la provincia y 134 fallecimientos. El número de casos curados asciende a 1904 y el total de pruebas realizadas desde el inicio de la pandemia ya está en los 38.237 test.
A México sin ver a sus familiares
El cambio de la situación epidemiológica en un concello, según el grado de afectación, implica el blindaje inmediato de las residencias de mayores. Hay centros como el de Beariz que no reciben visitas de familiares desde el pasado 10 de julio, cuando se detectó un brote en el municipio. Es el centro que más tiempo lleva cerrado y ya son siete en la provincia los que la Consellería de Política Social mantiene con restricciones: Chandrexa de Queixa, Baños de Molgas y Avión son, junto a Beariz, los que más tiempo llevan cerrados. Ahora se suman las residencias de O xardín da Rabela, en San Cibrao, y los DomusVi y Os Milagres de Barbadás. El covid, por suerte, no ha llegado a los centros de mayores. Política Social informó ayer del caso de una trabajadora del centro DomusVi de Barra de Miño, en Coles. Sin embargo, la mujer se contagió durante sus vacaciones y ni siquiera tuvo contacto con el centro ni llegó a incorporarse. Con todo, Política Social realizó PCR preventivas a usuarios y trabajadores del centro.
Más de un mes blindados
El cierre de las visitas en Beariz, tierra de emigrantes, implica la probabilidad de que haya vecinos que volverán a su país sin poder ver a sus familiares en la residencia, blindada desde el pasado 10 de julio. "Esperamos que a semana que vén nos digan algo dende a Xunta. Hoxe era aquí festa e sempre viña a charanga. Botárono en falta pero bailaron entre eles. Tamén hai moitos familiares emigrantes que queren ver aos usuarios, pero aínda non o saben. Entendemos ás familias, pero hai que ir pouco a pouco", dicen desde este centro de mayores.
Ana Torres, directora de O lecer dos avoíños en Coles, comenta que "as visitas seguen sendo de media hora por usuario", por lo que las nuevas medidas de restricción de la Xunta no les afectan a su plan de desescalada. "As familias compréndeno", añade.
En el centro residencial de Esgos, la misma línea. "Los usuarios ya no salían y recibían una visita semanalmente", apuntan.
