El gobierno municipal que salga de la sesión de investidura de este próximo sábado tendrá en sus manos cuatro concesiones municipales ahora en precario (es decir, ya caducadas) con un valor conjunto superior a los 250 millones de euros, tras la incapacidad por parte del gobierno de Gonzalo Pérez Jácome de sacar ninguna de ellas adelante durante el mandato a punto de finalizar.
Agua, limpieza viaria, transporte y grúa y ORA están en precario y, juntas suman un gasto corriente anual que supera los 25 millones de euros anuales. Con el plazo concesional que se prevé y es habitual a 10 años, el montante superaría los 250 millones, cantidad que seguramente sea superior al actualizarse los precios conforme al mercado.
Estos cuatro contratos en juego son de larga duración, al menos 10 años y hasta 25 años en el caso del agua, por lo que el dinero en juego -máxime tras las sospechas que se ciernen sobre el actual gobierno Jácome- no pasa desapercibido a nadie.
Agua
El servicio de abastecimiento y saneamiento de agua está en precario, con el contrato caducado, desde el año 2018. Era la concesión más duradera, pues se había adjudicado a principios de la década de los 90. Es la “joya de la corona” y el Concello ya ha publicado el estudio económico financiero, que incluye 60 millones de euros de inversión en obras, entre ellas la mejora de la red de saneamiento y abastecimiento, así como el soterramiento de la plaza de Concepción Arenal. Al Concello le costará el servicio al menos 7 millones al año (70 en 10 años o 175 millones a 25 años).
Transporte urbano
Caducado desde la primavera de 2015 tras 10 años de vigencia, el autobús urbano es una de las concesiones que debe salir de inmediato, tras los continuos incumplimientos de plazos del actual gobierno local. El Concello desembolsaba 5,5 millones cada año (a 10 años), aunque desde que está en precario, las facturas se incrementaron conforme al incremento de costes llegando a superar los 7 millones anuales, por lo que se espera que el contrato supere los 70 millones.
Grúa y ORA
En manos del Grupo Doal desde 2006, el servicio de ORA y grúa suma ya siete años y medio en precario. Con un coste anual de 1,4 millones de euros para el Concello (14 millones a 10 años), la ORA se ha convertido en un foco de complicaciones para los usuarios, que se enfrentan a unos parquímetros obsoletos que solo admiten cantidades en metálico justas, con el pago de tarjeta sin ser una posibilidad real en muchas máquinas o la imposibilidad de aprovechar nuevas tecnologías como los smartphones para el pago o la identificación de matrícula. Mientras, Ourense soporta las tarifas y multas más elevadas de Galicia.
Limpieza y basura
Los 10 años de contrato que en 2010 se firmaron con la UTE Ecourense vencieron y el Concello se enfrenta a la renovación de uno de los servicios que más percibe la ciudadanía. En el documento elaborado en 2022 por una consultora se propone un gasto anual de 12,14 millones y 10 años de plazo mínimo concesional, superaría en 120 millones el coste.
