París de Noia y Olympus actuarán en un pueblo de Vilamarín por una particular apuesta

Belcrime, con 24 vecinos, tendrá una fiesta con dos de las orquestas top de la verbena gallega

Un pueblo de 24 vecinos, Belcrime (Vilamarín), ha conseguido un hito inédito. Este próximo viernes, día 7, celebrará sus humildes fiestas patronales con dos orquestas top de Galicia: Olympus y París de Noia. Todo organizado en un lapso de tiempo de 15 días y, en el caso de París de Noia, por una apuesta realizada en un bar de Cambeo (Coles) este pasado fin de semana entre el único miembro de la comisión, Roberto Gómez Álvarez, y Héctor Caramés, representante de orquestas. Este último vio que quedaba libre la fecha a última hora y se picó con Roberto sobre si sería posible traer la París a las fiestas de un pueblo tan pequeño. Roberto hizo un vídeo y si tenía más de 1.000 me gustas, Héctor, dueño de Espectáculos Héctor, el representante, buscaba la manera de financiarlo; si no, lo asumiría la comisión, es decir, Roberto, que se ha desgañitado para vender rifas y conseguir publicidad. Para blindar el acuerdo, tuvieron la curiosa idea de firmar un “contrato” en las paredes de la cafetería Miñaxoia (Cambeo). Ya no había vuelta atrás. 

Aunque todavía no ha llegado al millar de “likes”, dicho y hecho, la París ya se ha incorporado al cartel. “Somos amigos, el é representante de orquestas e estaba mirando o móbil e viu que a París quedara libre para este venres”. Ahí empezó el pique: “E se a traes a Belcrime?”, le picaba Héctor. “Se fago un vídeo e ten mil me gustas, tráioa e págala ti, e se non, págoa eu”, le espetó Roberto. Dejaron todo sellado en la pared de la cafetería. “Un contrato nun papel pódese borrar, pero na parede é máis difícil”, asegura Roberto, que se comprometió a repintar la pared cuanto antes: ”A ver se alguén dá algo de pasta para pintala, que andamos xustos”, bromea.

Por su parte, Héctor dice que ha habido un bum de interés con la noticia y que la expectación hará que esto se acabe autofinanciado. “Non recordo unha festa que meta a dúas das formacións grandes de Galicia xuntas, nunha aldea case sen veciños, e todo  exprés. Hai 15 días organizouse a festa e o da París hai tres días. Imaxina o traballo que leva el, e o que estou levando eu polo meu lado”, remata.

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