La Policía Nacional en Ourense ha abierto una investigación sobre unos incidentes protagonizados por piquetes de la huelga del metal en la empresa Revi, ubicada en Quintela de Canedo. La grabación de vídeo de una cámara de seguridad, que estudia la Policía muestra una agresión de miembros de un piquete a dos vigilantes jurados en uno de los laterales de la fábrica.
Fuentes policiales indican que los hechos ocurrieron entre las 21,00 y las 22,30 horas del jueves, segundo día de paro convocado por la CIG, CCOO y UGT-FICA. En el vídeo, que está siendo analizado para determinar las responsabilidades del caso, se ve como piquetes sindicales pretenden entrar al recinto abriendo el portón deslizante del acceso para vehículos de la pista de Vilanova. Mientras dos vigilantes de la empresa Eulen se encaran con los individuos, se ve cómo uno de ellos vuelca una torre de bobinas de madera, provocando la respuesta de los agentes de seguridad, que intentan detenerlo.
Entonces comienza un forcejeo entre el grupo que pretendía entrar en el recinto y los dos vigilantes, que reciben varios golpes. Durante el tumulto se aprecia como integrantes de los piquetes echan a rodar tres de las bobinas por la pendiente del exterior. Afortunadamente, no había vehículos estacionados y nadie circulaba por la vía, aunque uno de estos carretes de metro y medio de diámetro colisionó contra una vivienda cercana.
El forcejeo duró unos segundos hasta que los sindicalistas se dispersaron antes de que llegasen refuerzos y agentes de la Policía Nacional. Fuentes de la investigación indican que resultaron heridos dos de los tres vigilantes.
De la investigación de la Policía Nacional se desprende la posible identificación de Indalecio Gómez, secretario de Industria de la CIG, como uno de los integrantes del piquete.
Patronal y sindicatos siguen muy alejados de una solución al conflicto
En la tercera jornada de huelga indefinida del sector del siderometal, las dos partes del conflicto siguen presentando posturas muy distantes de generar un acuerdo.
Desde los sindicatos critican a la patronal por la propuesta “inamovible” que ofreció durante la reunión, de menos de media hora, celebrada el pasado martes con la intención de evitar la huelga indefinida.
Los representantes de los trabajadores insisten en que quieren sentarse a negociar y que la intención real de las empresas es “demorar” un hipotético acuerdo para ver cuánto pueden prolongar la huelga.
En la otra cara del conflicto laboral, desde la patronal advierten que es el turno de los sindicatos de aportar una contraoferta que permita mover las posturas hacia una resolución.
Además, indican que en algunos trabajadores que quieren trabajar han sido “coaccionados” y reclaman una “huelga pacífica”.
