El Gobierno central descarta establecer bonificaciones en el peaje de la autopista AP-52 de Santiago. Así lo confirma por escrito la respuesta a una pregunta en el Congreso de los diputados del PP, que preguntaron el pasado mes de enero por la posibilidad de descuentos a los usuarios en esta vía, “para mejorar la competitividad y seguridad vial”. Este “portazo” del ejecutivo a las bonificaciones crispa a los usuarios del trayecto entre Ourense y Santiago que, además, se encareció el pasado mes de enero. Así, entre Lalín y Santiago se paga 6,15 euros para los coches, 10,40 para los vehículos pesados de categoría 1 y 12,35 para los vehículos pesados 2.
Galicia ve agravio comparativo con esta autopista, ya que la falta de bonificaciones se produce mientras sí se abordan descuentos en la AP-9. De hecho, los populares recuerdan que esta autopista es “clave para la vertebración interior de Galicia” y “no está cumpliendo esa función”. Los diputados subrayan que mientras no haya bonificaciones en la AP-53, el tramo de autovía entre Dozón y Ourense (de titularidad autonómica y gratuito), capta 8.500 vehículos al día frente a los 1.500 del tramo paralelo de la carretera nacional. Lo mismo en la N-525, cuyo tráfico diario se eleva a los 10.000 vehículos en el tramo paralelo a la A-53. Los populares insisten en pedir la gratuidad del viaje de vuelta para los vehículos ligeros que hagan el regreso en 24 horas, reducir un 20% adicional para los que hagan 20 desplazamientos al mes y otro 20% para vehículos de pago.
