Los aerogeneradores que amenazaban el entorno de la sierra y la práctica del parapente no existirán. La Xunta desestimó los dos proyectos que aún quedaban en pie por su impacto ambiental
La serra do Larouco se libra de los molinos eólicos. El Diario Oficial de Galicia publicó ayer las declaraciones de impacto ambiental (DIA) de los parques Tramontana y Mistral, los documentos que avalan o rechazan su viabilidad ecológica y social. Ambos escritos echan por tierra los dos proyectos. El jueves de la semana pasada, se conocía que el parque San Martiño tampoco salía adelante.
Los tres proyectos amenazaban el entorno de la sierra y las actividades que allí se practican, como el parapentismo, que aprovecha un entorno privilegiado para organizar campeonatos autonómicos y nacionales. Por ejemplo, es uno de los lugares de visita del Campeonato de Portugal.
Tramontana y Mistral se han quedado en la tramitación ambiental. El primero preveía instalar ocho aerogeneradores que sumarían una potencia total de 26,4 megavatios (MW). El segundo, siete molinos con una capacidad de producción de 23,1 MW. Los dos, cercanos entre sí.
En las proximidades ya existen dos parques eólicos, Larouco fase uno y fase dos. La escasa distancia de Tramontana y Mistral, junto con el contiguo proyecto de San Martiño, multiplicarían el impacto de los aerogeneradores. Por ello, la Dirección Xeral de Patrimonio Natural alerta sobre los proyectos en el informe que aportaron al expediente. Si se construyesen los molinos el impacto ambiental sería “crítico”, ya que supondrían una barrera para las aves. De este modo, rechaza Tramontana y condiciona Mistral, reduciéndolo a tan solo un aerogenerador.
No son el único organismo que puso obstáculos. Los concellos afectados presentaron objeciones: Xinzo, Cualedro y Baltar, en el caso de Tramontana, y solo Baltar, en el caso de Mistral. La Dirección Xeral de Patrimonio Cultural tampoco dio un parecer favorable sobre los proyectos, descartando el primero y condicionando el segundo. Y el Instituto de Estudos do Territorio censuró ambas planificaciones por su “importante intrusión visual” y porque “os impactos sobre a paisaxe poden resultar críticos”.
Los colectivos implicados en la lucha contra estos proyectos eólicos saludaron los informes ambientales publicados ayer. Uno de ellos es el Club Parapente Baltar, volcado en el rechazo contra tres parques que amenazaban el santuario ourensano de esta disciplina.
“Estamos bastante contentos, porque así podemos traballar dunha maneira máis clara”, manifiesta desde el club Enrique Cuquejo, quien explica que el parque Tramontana era el principal riesgo para la práctica del deporte. “Estaba xusto detrás do despegue, nunha zona na que adoitamos voar a esa altura. Afectaríanos de forma total, non poderiamos facer máis campionatos e a nivel de cursos e voo sería moi perigoso”, detalla.
La plataforma Stop Eólicos Xurés-Celanova también aplaudió la noticia. “O Larouco, libre de eólicos e de liñas de alta tensión. Non haberá macroeólicos no Larouco, nin na Aguioncha, nin no Monte Grande nin no Monte da Neve”, celebraron en redes sociales. Hoy se reunirán en la ciudad todas las plataformas y colectivos “da loita antieólica”, según avanzaron.
Los tres proyectos que decayeron se encontraban en la misma área de desarrollo eólico (las zonas demarcadas para planificar parques). Los colectivos críticos apelan a que se suprima este área. Cuquejo resalta que, de no hacerlo, todavía existe la posibilidad de que se instalen aerogeneradores en la zona. Desde Stop Eólicos también alertan de este escenario. En este sentido, continuarán “a loita” por revisar el Plan Eólico de Galicia y eliminar “as áreas de aproveitamento eólico nas nosas montañas”.
