El sindicato Confederación general del Trabajo (CGT) reclamó ayer a Renfe mejoras que permitan ganar usuarios en la línea de alta velocidad Ourense-Santiago-A Coruña, según demandaron ayer Juan Sánchez y Serafín Rodríguez, coordinadores de las secciones sindicales de Renfe y Adif en Galicia.
Según explicaron, en el primer mes de servicio se ha registrado una ocupación media del 22%, pero consideran que podría elevarse si se mejorasen enlaces, como el de Vilagarcía (que requiere una hora de espera en Santiago para poder venir a Ourense). También desde Monforte piden una conexión con Ourense que permita enlazar con el tren hacia A Coruña.
El sindicato demanda también una mejora de precios, que habitualmente se fijan por kilómetro recorrido, y que en esta línea superan en un 18% la media española. En concreto, en las restantes líneas que disponen de Avant, el precio por kilómetro oscila entre 13 y 14 céntimos, pero en la gallega supera los 15 céntimos.
Los representantes de CGT mostraron también su preocupación por los recortes presupuestarios en materia ferroviaria, ya que temen que afecte a las líneas deficitarias gallegas y se acaben suprimiendo. De hecho, reclamaron que se mantenga, porque otras líneas gallegas (como A Coruña -Vigo) son muy rentables.
El sindicato reiteró su reclamación de que el tráfico de la línea Ourense-Santiago se supervise en el centro de control de Ourense, y no en Atocha, como está ocurriendo, aunque en próximos meses se trasladará a León. También criticó la privatización de servicios que antes asumía personal de Renfe.
El sindicato demanda también una mejora de precios, que habitualmente se fijan por kilómetro recorrido, y que en esta línea superan en un 18% la media española. En concreto, en las restantes líneas que disponen de Avant, el precio por kilómetro oscila entre 13 y 14 céntimos, pero en la gallega supera los 15 céntimos.
Los representantes de CGT mostraron también su preocupación por los recortes presupuestarios en materia ferroviaria, ya que temen que afecte a las líneas deficitarias gallegas y se acaben suprimiendo. De hecho, reclamaron que se mantenga, porque otras líneas gallegas (como A Coruña -Vigo) son muy rentables.
El sindicato reiteró su reclamación de que el tráfico de la línea Ourense-Santiago se supervise en el centro de control de Ourense, y no en Atocha, como está ocurriendo, aunque en próximos meses se trasladará a León. También criticó la privatización de servicios que antes asumía personal de Renfe.
