El precio de las parcelas se convierte en uno de los principales obstáculos para la instalación de empresas, reconoce Xestur Ourense

El suelo industrial cuesta el triple que en León y Portugal

Una de las calles del parque de Pereiro, cuya superficie ya está completa y no puede ser ampliado. (Foto: MIGUEL ÁNGEL)
Xestur y el Instituto Galego de Vivenda e Solo tienen a la venta 310.530 metros cuadrados de suelo industrial, repartidos por los parques empresariales de Pereiro, Vilamarín, Carballiño, Ribadavia, Allariz, Vilar de Santos, Pontedeva, Celanova, O Barco y la Central de Transportes en San Cibrao, además de los privados de Barreiros y el Parque Tecnológico.
La mayor parte del terreno lleva años esperando comprador, un empresario que decida apostar. Pero la venta de terreno se realiza 'a cuentagotas porque tenemos dos fuertes competidores muy cerca, Portugal y León. El terreno industrial que hay en Ourense es muy competitivo dentro de la oferta de Galicia, pero es caro en comparación con los parques empresariales del norte de Portugal y León, donde están regalando el suelo', reconoció el gerente de Xestur, Argimiro Marnotes.

La diferencia viene dada por la adquisición inicial del terreno a particulares para desarrollar el parque empresarial pues, mientras en Ourense, según Argimiro Marnotes, es caro, en las zonas limítrofes los propios vecinos lo regalan. Después está la ubicación, servicios, urbanización y orografía del terreno. 'Construir un polígono industrial en Ourense nos puede llevar más de diez años, caso del de Pereiro de Aguiar, que tiene 600.000 metros cuadrados. Este polígono se comenzó en el 2000, fuimos facilitando terreno según había demanda y se acabó este año', aseguró el gerente de Xestur.

Los parques leoneses más cercanos a la provincia son los de Toral de los Vados, situado en la carretera N-120, a escasos 15 kilómetros de la comarca de Valdeorras, y el de Ponferrada. En ambos espacios, que tienen más de 150.00 metros de terreno a la venta, se asentaron nueve empresas ourensanas, la mayoría procedentes de Valdeorras, en los últimos siete años, según los datos que maneja la Junta de Castilla y León.

En Portugal, el principal competidor es Chaves, en el que, según datos de la Cámara municipal, abren a diario las puertas cinco empresas ourensanas, pero también están los de Montalegre (tres empresas ourensanas), Valpaços y Ponte da Barca.

Los precios
El precio del suelo industrial en Ourense varía, pues puede ir desde los 40 hasta los 80 euros el metro cuadrado. La última venta de parcelas que realizó Xestur fue en el parque empresarial de Pereiro y el precio fue a 80 euros el metro.

Sin embargo, la cifra es distinta en los parques portugueses, donde el metro cuadrado no supera los 20 euros. En los dos de León cercanos a la provincia gira entre los 20 y los 30 euros. En ambas zonas, además de las empresas ourensanas, hay otras foráneas que se asentaron en el lugar tras meses de búsqueda de terreno en condiciones por diferentes puntos del territorio nacional.

Empresas familiares
En la provincia, exceptuando los tres parques empresariales cercanos a la ciudad, en los restantes (O Barco, Vilamarín, Celanova, Ribadavia, Verín, A Rúa, Carballiño, Xinzo, Sarreaus, Allariz, Vilar de Santos) predominan pequeñas empresas familiares (cerrajerías, aserraderos, cristalerías y muebles, entre otros), talleres y concesionarios de coches, estaciones de servicio e incluso almacenes de alimentación y productos agrícolas, en las que trabaja una media de entre cuatro y cinco personas. 'No tenemos grandes fábricas con muchos puestos de trabajo porque los puertos de mar tiran y mucho a la hora de montar una gran industria', afirma Argimiro Marnotes.

En todos los parques también abundan naves de empresas que adquirieron el terreno pero aún no pusieron en marcha el negocio, al ser construidas sólo para desgravar impuestos.

También se pueden observar parcelas compradas pero no ocupadas y naves que fueron adquiridas por la Administración para instalar puntos limpios, guardar coches, poner en marcha parques de bomberos (caso del poligono de Pazos en Verín) e incluso para que los conductores pasen las inspecciones técnicas a sus respectivos vehículos.

Seis nuevos polígonos a partir de este año

A Gudiña, Trives, Riós, Rubiá, Paderne de Allariz y Viana se incorporarán este año a la lista de municipios con parque empresarial. Xestur y el Instituto Galego de Vivenda e Solo también tiene previsto ampliar el de Xinzo, Vilamarín, A Rúa, O Barco, Celanova, Ribadavia y Verín, donde, además será construido otro nuevo en los alrededores de la localidad de Tamagos. 'No debemos olvidar que un parque empresarial, además de servir para atraer empresas, también tiene como objetivo concentrar toda la actividad industrial en una zona y retirarla de los respectivos cascos urbanos', explicó Argimiro Marnotes, recalcando que el deber de la Administración es tener siempre suelo empresarial a disposición de los empresarios.

Pontedeva ofrece terreno a tres euros
El municipio de Pontedeva, donde residen poco más de 600 vecinos, decidió romper los precios del suelo industrial en Ourense y en la actualidad oferta terreno a tres euros el metro cuadrado. 'Estamos muy cerca de A Cañiza, a tres minutos en coche; si vendemos el metro cuadrado de suelo a los precios estipulados por Xestur, ningún empresario se fija en Pontedeva, se queda en Ourense, Ribadavia o A Cañiza', aseguró el alcalde, Juan Carlos González
Ponteveda, según el regidor, está intentando hacer el 'milagro de la dinamización del rural' atrayendo empresas para crear puestos de trabajo y, así fijar población.

En el año 2005, el Concello elaboró el proyecto de parque empresarial con una extensión de más de 100.000 metros cuadrados, que ya fueron vendidos y están ocupados por 15 empresas. En la actualidad, la Xunta ya le dio el visto bueno para que el nuevo Plan Xeral de Urbanismo contemple la ampliación del espacio industrial en otros 80.000 metros cuadrados. 'El terreno lo estamos vendiendo a tres euros el metro', explicó el regidor.

Rebaja

La rebaja fue posible gracias a la colaboración de los comuneros, que pusieron el suelo a disposición del Concello. El suelo, al ser monte comunal, no podía ser cedido ni regalado a la entidad local, pero comuneros y grupo de gobierno recurrieron a la expropiación, cuyo precio se fijó en tres céntimos de euro el metro cuadrado. Ya con los terrenos disponibles, el Concello se encargó de la urbanización recaban subvenciones en la Xunta y Diputación.

En la actualidad, los empresarios ya asentados en la zona disponen de todos los servicios básicos e incluso una torreta propia para conectarse sin dificultadas a las nuevas tecnologías de la información.

La puesta en marcha de este parque empresarial coincidió con la apertura de nuevas carreteras, tanto hacia Ribadavia y Ourense como hacia la provincia de Pontevedra.

Terrenos privados
La mayoría de los parques empresariales de la provincia fueron construidos sobre terrenos adquiridos a particulares, en puntos, que según los datos que manejan Xestur, fueron escogidos por los correspondientes grupos de gobierno. Eso sí, todos ellos están situados en las inmediaciones de las principales carreteras que surcan el municipio.

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