Talgo ha desplazado hasta Ourense uno de sus trenes de ancho variable de los Avril que ha fabricado para Renfe con el objetivo de iniciar las pruebas a muy alta velocidad en ancho ibérico por la línea AVE de Ourense a Santiago y a velocidades máximas de hasta 200 km/h por el corredor del eje atlántico. Se trata de la unidad 106-056 con la que realizará pruebas de homologación a lo largo de una semana, siempre en horario nocturno. Está autorizado a superar los 360 kilómetros por hora en el tramo de ancho ibérico de la línea gallega de alta velocidad, aunque su circulación ya en servicio comercial no excederá los 300.
El tren llegó a Ourense en la mañana del sábado, remolcado por una locomotora eléctrica 252 desde León. No lo hizo por la línea de alta velocidad, sino por la vieja vía de Monforte, cruzando Os Peares a 50 kilómetros por hora. Las pruebas serán realizadas en horario nocturno, en la banda que Adif reserva al mantenimiento de la línea. Con anterioridad, en los primeros días del pasado mes de junio, fueron realizadas pruebas por la línea gallega de ancho estándar hasta el cambiador de Taboadela. Pero las circulaciones por la red gallega de ancho ibérico por la que circulará cuando opere en servicio comercial hasta las ciudades de Vigo y A Coruña, quedaron aplazadas hasta este momento.
El retraso en las pruebas, que Talgo atribuye a Adif por no ofrecer surcos para realizarlas y a Renfe por no disponer de maquinistas, suma meses a la demora que se produjo en la fabricación de estos trenes: quince de ancho estándar para reforzar los servicios Avlo y otras líneas de AVE y 15 para prolongar los servicios AVE en aquellas líneas que tienen parte de su trazado en ancho ibérico, como sucede en Galicia a donde serán asignados 7 u 8 trenes y a las ciudades del corredor Norte en las que ya hay un importante trayecto en alta velocidad como sucede con Asturias, a donde llegan los trenes en alta velocidad hasta León y País Vasco que ya está más cerca desde la inauguración el pasado julio del tramo hasta Burgos.
Los trenes que duplicarán el número de plazas a Madrid
Renfe espera como agua de mayo la recepción de los Avril, tanto los 15 normales como los 15 de rodadura variable. Y lo cierto es que tendrá que esperar casi hasta mayo de 2023 para tener operativos los que circulen por la línea gallega, ya que en las previsiones de Talgo se señala el segundo trimestre del próximo año como fecha probable para la entrega de los que puedan circular por líneas de ancho ibérico. Para Galicia resultan imprescindibles, no solo pàra asegurar tiempos de viaje más cortos entre Madrid y Santiago, A Coruña y Vigo. También para aumentar el número de plazas aumentar el número de plazas en una línea que ya está al borde de la capacidad con los servicios actuales, como se demostró a lo largo del verano en el que durante muchos días se alcanzó el cien por cien de ocupación en los trenes que comunican Ourense con Madrid. Los nuevos trenes añadirán una media de dos mil plazas diarias por sentido y facilitarán la posibilidad de que Renfe introduzca algún servicio Low Cost a Galicia con su marca AVLO.
