Los supermercados e hipermercados de la provincia siempre ofrecieron a los clientes tintes para el pelo y máquinas para cortarlo, pero sus responsables nunca registraron tanta demanda de este tipo de productos como hasta ahora. Las estanterías quedan prácticamente vacías a diario y los trabajadores ya los incluyeron como algo "muy demandado" a la hora de hacer el pedido para reponer existencias. "Las peluquerías están cerradas y me pinto las canas en casa. Puede que no me quede tan bien como en una peluquería, pero me sirve para salir del paso", aseguraba ayer una vecina mientras revisaba los distintos productos en un supermercado de Xinzo.
Este tipo de productos pasaron prácticamente inadvertidos nada más ser decretado el estado de alarma para evitar la propagación del coronavirus, pero a medida que el Gobierno central lo fue prorrogado comenzaron a ganar valor, a aumentar las ventas, sobre todo la de los tintes. "En la ciudad puedes llamar a una peluquera. Las hay que trabajan a domicilio, pero en el medio rural no es tan frecuente este tipo de servicios y no puedes estar dos meses esperando para teñirte o cortar el pelo", aseguraba otra cliente del supermercado. El confinamiento de la población en sus viviendas facilita las cosas. "Le pido a mi hija que me ayude y entre las dos nos las arreglamos para teñir el pelo", añadía la mujer.
Solo en caso urgente
El decreto de alarma mantiene cerradas las peluquerías, aunque permite los servios a domicilio y a los más vulnerables. Sonia García es una profesional que se dedica a cortar el pelo a domicilio y tiene su propia clientela. "La situación es grave y hay que extremar mucho las medidas de seguridad. Solo atiendo los casos que son muy urgentes, de extrema necesidad", asegura. La falta de servicio desempolvó las máquinas de cortar pelo y las tijeras, sobre todo entre los hombres. "Conozco a clientes que se lo cortó un familiar. Hay hombres que llevan el pelo corto y con la máquina sales del paso", añadió la peluquera, puntualizando que una mujer, al tener el pelo más largo, "es más difícil el corte".