A tiros en Coles por droga

La supuesta compra de un kilo de cocaína acabó con Pablo B. S. en el hospital con una bala alojada en el glúteo, a escasos milímetros de la arteria femoral. La víctima acusa ahora a tres hombres de una tentativa de homicidio: David E.S., Jairo C.A. y Francisco E.L (padre de David). Para los dos primeros reclama hasta nueve años de prisión y cinco para el tercero. Según sostiene, no participó directamente en el tirorteo pero “hizo labores de cobertura y aseguramiento en la perpetración del crimen”. La fiscal solo acusa a David y Jairo para los que interesa seis años de cárcel.

Las acusaciones coinciden en que David y Jairo, oriundo de la República Dominicana, se desplazaron desde Monforte de Lemos y quedaron con Pablo en el municipio de Coles. La fiscal habla de “actividad ilícita derivada del tráfico de drogas”.

David, según la versión dada por el denunciante a lo largo de la instrucción sumarial, salió al encuentro del presunto vendedor. No llegaron a un acuerdo y los ánimos de caldearon, aunque los investigadores de la Guardia Civil creen que los acusados intentaron dar el “palo” a la víctima. En un momento dado, el conductor detuvo el coche en Penasalbas, en un lugar apartado, con la excusa de enseñar a Pablo el dinero que llevaba en la parte trasera. Este último salió a fumar y vio en ese momento a Jairo, quien irrumpió en la escena, y escuchó como el otro inculpado le decía: “Dale”. Asegura que Jairo llevaba una pistola y que le apuntó a la cabeza. “Pablo cogió la muñeca a Jairo y hubo un primer disparo que le rozó la cabeza”, precisa el letrado de la acusación particular. Hubo un segundo disparo que le alcanzó la nalga hasta que echó a correr y se refugió en una vivienda cercana. Y escuchó un tercer disparo, según sostiene.

Pablo B.S. sufrió una herida penetrante de arma de fuego con orificio de entrada en el cuadrante superior del glúteo derecho. La bala quedó alojada en la cara interior interna de la ingle derecha. Atravesó los músculos y perforó el cuello femoral derecho. Tuvo que ser operado y estuvo hospitalizado durante dos días. Pese a que fue citado por el forense para una valoración en dos ocasiones, no acudió.

El abogado de los inculpados, Luis Salgado Carbajales, habla de “ausencia de participación en los hechos por parte de mis defendidos”. Y muestra su “sorpresa” por la calificación de la acusación particular respecto a Francisco E.L., “al no constar ningún dato en la causa que lo incrimine, como prueba que la fiscal no formule acusación frente a este”.

Detenidos cinco meses después en Monforte

La detención de los procesados no se materializó hasta el 23 de junio en el marco de la operación Pensa. La Guardia Civil detuvo a los tres hombres residentes en Monforte de Lemos y efectuó cuatro registros domiciliarios. Los agentes se incautaron en una de las viviendas deuna escopeta, un armazón de un revólver, 1.200 cartuchos de diferentes calibres, seis teléfonos móviles y documentación.