El Ministerio de Transición Ecológica anunciaba este jueves que abría un expediente a las empresas hidroeléctricas gestoras de los embalses de las demarcaciones hidrográficas Miño-Sil (donde están los ourensanos, que son mayoría en la cuenca), Duero y Tajo por un probable turbinado excesivo para maximizar beneficios a la hora de producir electricidad, aprovechando el récord de precios del mercado mayorista -ayer se marcaba el segundo máximo histórico-. Estas sospechas se fundamentan al estar las presas de As Portas (la más grande de Ourense) y del Cenza (ambas gestionados por Iberdrola) en niveles anormalmente bajos.
Según los datos del ministerio, los embalses de producción hidroeléctrica (se excluyen los de abastecimiento) que más han sido ‘exprimidos’ en España este verano son precisamente los de la cuenca Miño-Sil y, por ende, los ourensanos. Y es que la sequía primaveral en buena parte de España parece querer compensarse ahora mediante la explotación excesiva de las presas del interior gallego, que contaban con más reservas. Y es que la demarcación donde están las presas ourensanas está al 46,1% de su capacidad , frente al 69,4% de media de los últimos cinco años.
Se trata de un descenso de 23,3 puntos porcentuales. En el Tajo, aunque están a un nivel más bajo (43,5%), la diferencia respecto a lo habitual estas fechas es menor, con 20,5 puntos menos. El Duero, la cuenca que dio la voz de alarma, está hoy al 56,7% de su capacidad, solo 6,8 puntos por debajo de lo habitual.
El vaciado de los embalses ourensanos es superior al de cualquier cuenca si se compara también con 2020, 2019 y 2018 por separado, e incluso con la media de la última década.
La gestión estatal contrasta con la de los embalses que controla la Xunta, en la demarcación Galicia-Costa. Allí, están al 64,3% de llenado, más que el año pasado y apenas 5 puntos por debajo de la media de los últimos 10 años.
El BNG pide sanciones por el “baleirado histórico” de los embalses
El diputado del BNG, Iago Tabarés, alertó ayer de las “importantísimas” consecuencias sociales y ambientales del vaciado de embalses e instó a Gobierno y Xunta a poner sanciones para impedir esta “sobreexplotación”, resaltando la situación de las presas de As Portas y Cenza, ambas de Iberdrola.
La Hidrográfica no descarta sanciones y ve “normal” que haya “alarma social”
La Confederación Hidrográfica Miño-Sil no descarta sanciones y espera que las empresas tomen nota. Así lo señaló el presidente, José Antonio Quiroga, que aunque resaltó que “están a cumprir as normas de explotación”, hay un “turbinado excesivo” que está provocando “alarma social, e non é para menos”.
La Xunta pide un “control eficaz” al Gobierno en la cuenca Miño-Sil
La Xunta garantizó la “vigilancia estricta” en los embalses de la demarcación Galicia-Costa, de competencia autonómica, y pidió al Gobierno que haga “lo mismo” en la confederación Miño-Sil, de competencia estatal. Ven “preocupante” lo acontecido en determinados embalses.
La mayor presa, As Portas, bate mínimos históricos de agosto
Otros embalses bajo mínimos son el de Salas (Muíños), que gestiona Naturgy, que está a un 27,3%, pero lejos aún del 10% con el que legalmente podría quedarse, si bien también está dejando un paisaje lunar pronunciado por el vaciado de las últimas semanas. El de Albarellos (Avión), también está ya por debajo del 26% de agua almacenada.
Todo esto se produce mientras ayer se marcaba el segundo precio más alto de la historia en el mercado mayorista de la luz (117,14 megavatios/hora). Iberdrola se escuda en que realizan la explotación “dentro de los rangos establecidos y con normalidad”.
