Eurovisión, al ritmo de Blanca Paloma

Blanca Paloma. ADAM VAUGHAN
photo_camera Blanca Paloma. ADAM VAUGHAN
La artista ilicitana Blanca Paloma interpretó “Eaea” dejando desprender una garra y energía que consiguió conectar con el público gracias a su potente chorro de voz emulando una actuación parecida a la que le llevó a conquistar el Benidorm Fest el pasado febrero

Blanca Paloma, representante de España en el festival de Eurovisión 2023, se subió este sábado al escenario para interpretar “Eaea”, una nana flamenca con la que la artista quiso homenajear a su yaya Carmen.

La artista ilicitana reconocía el pasado viernes que “cada vez que la interpreto, me emociona. Nunca ha sido una canción que me haya cansado, ya que junto a (el productor) José Pablo Polo la hemos mantenido viva”. Su propuesta fue parecida a la que la llevó a la victoria en el Benidorm Fest, dejando desprender una garra y energía que logró hipnotizar a los espectadores gracias a su gran chorro de voz. 

Acompañada por su grupo de bailarinas, Angélica Moyano, Paloma Scharfhausen y Paula Valbuena, y las dos palmeras Desiré Paredes y Saray Frutos, consiguió clavar cada uno de los movimientos para completar una puesta en escena sobresaliente. 

La cantante, que actuó en octava posición, interpretó la canción vestida de arquera, ataviada con un pantalón, con corte goyesco, de cuero blanco, en la parte superior una cinturilla, que enlaza con las otras dos piezas del traje y un corpiño, esculpido sobre un molde y que emula a un corazón. 

Este último, en palabras su estilista, Raúl Amor, “es una escultura que se ha hecho sobre su propio cuerpo. Esta pieza reúne la fuerza, la pasión, el músculo, la dureza, la protección de la armadura, pero con formas suaves y orgánicas que le dan esa dualidad tan especial”.

Su interpretación fue seguida de cerca por sus vecinos de Elche a través de dos pantallas gigantes, mientras que en la fachada del consistorio de la ciudad se reproducían imágenes de la artista para apoyarla.

La gran sorpresa de la noche la protagonizó Kate Middleton. Fue en el vídeo de apertura, después de una panorámica del castillo de Windsor, cuando la princesa de Gales aparece apenas unos segundos vestida de azul y sentada al piano mientras acompaña a las teclas la interpretación de “Stefania”, el tema ganador de 2022.

Su participación sirvió para recordar la ola de solidaridad en toda Europa que despertó Ucrania en el festival poco después de que fuera atacado por Rusia el pasado año y que ese conflicto es aún el responsable de que el festival no se celebrase allí en esta edición, sino en Liverpool (Reino Unido), cuna de los Beatles.

En sus muelles a orillas del río Mersey, con los viejos barracones de ladrillo rojo reconvertidos en la zona más icónica de la ciudad, se sitúa el Liverpool Arena que acogió las actuaciones de Eurovisión.

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