El envejecimiento es un proceso natural y fisiológico pero también, un proceso complejo y multifactorial por el que pasan todos los organismos. La esperanza de vida aumenta a un ritmo constante y, como resultado, las enfermedades relacionadas con la edad, así como las discapacidades físicas y mentales aumentan en consecuencia. Mientras que el 80 % de las personas mayores padecen una enfermedad relacionada con la edad, como diabetes, hipertensión o enfermedades cardíacas, el 50 % tiene al menos dos afecciones relacionadas con la edad.
A día de hoy, las consecuencias biológicas del envejecimiento siguen sin dilucidarse en gran medida, aunque son valiosos los datos que la ciencia aporta sobre las enfermedades relacionadas al envejecimiento.
En este contexto un trabajo de revisión sistemática realizado por la universidad de Sanko (Turquía), evaluó la evidencia actual sobre el posible papel del jengibre y sus compuestos en la prevención del envejecimiento.
El jengibre (Zingiber officinale) una planta perteneciente a la familia Zingiberaceae, se ha consumido durante años en los países asiáticos, tanto como hierba culinaria como medicinal para el tratamiento de diversas enfermedades.
Después de una recopilación y análisis de diferentes estudios y ensayos de investigación, los autores han señalado la evidencia de que el jengibre puede promover un envejecimiento saludable, reducir la enfermedad y prolongar la vida saludable. Se apunta que el consumo de té de jengibre puede prevenir y curar eficazmente los resfriados, el dolor de garganta y la tos, y también reducir la inflamación.
El jengibre, ha demostrado poseer propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, anticancerígenas y antimicrobianas, así como una destacada actividad antiviral debido a la cantidad de compuestos antivirales que contiene.
REF: Ozkur y col. Jengibre para un envejecimiento saludable: una revisión sistemática de la evidencia actual de sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y anticancerígenas, Oxid Med Cell Longev. 2022; 2022: 4748447.
