Las crecidas del Sil de los últimos días arrastraron todo lo que encontraron a su paso. Desde casetas de obras hasta alguna de las lanchas de madera amarradas en el Malecón.
Las grandes crecidas del río Sil no sólo arrastraron ramas y troncos en los últimos días. De esta circunstancia es testigo el propietario de la lancha que el agua se llevó y que pudo verse hundida entre los árboles que crecen en la pequeña isla del Paseo del Malecón de O Barco, a la altura de la calle Abdón Blanco. Su presencia despertó el interés de los paseantes, que no están acostumbrados a ver los efectos del temporal en su flota de barcas de madera.