Labores de limpieza en el río Pinguela en A Rúa

Limpieza de un arroyo, en A Rúa.
photo_camera Limpieza de un arroyo, en A Rúa.

Veinte días tardaron los trabajadores de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil en limpiar de maleza el tramo superior del arroyo de A Pinguela. El organismo responsable de cuenca acometió los trabajos a petición del Concello que dirige Avelino García Ferradal, después de que este recogiese las solicitudes de los vecinos de la zona, preocupados ante la posibilidad de que el arroyo se desborde durante una crecida y pueda llegar a ocasionar daños en las propiedades.

El regidor explicó que el tramo de arroyo desbrozado llevaba muchos años sin ser objeto de limpieza alguna. "Estaba cubierto de maleza y ya comenzaba a llegar a las casas", dijo el alcalde. Añadió que los trabajos aún están sin finalizar de forma definitiva, pues resta por retirar la abundante maleza cortada por los trabajadores de la Confederación Hidrográfica.

La limpieza dejó a la vista una zona de paseo, que permite acceder a este paraje desde las inmediaciones de la bodega A Coroa, y caminar desde el paraje denominado O Barrio.

La realizada en las últimas semanas no es la primera limpieza realizada en este arroyo. El tramo inferior, encauzado hace años con cemento, también fue objeto de una intensa limpieza no hace mucho. Los trabajos abarcaron todo el arroyo, hasta su desembocadura en el río Sil. Fueron realizados hace un par de años, si bien en aquella ocasión fueron los trabajadores de las brigadas municipales los que los realizaron.

Otra zona objeto de atención de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil es la de A Reza, según explicó el alcalde. Este paraje está situado en la zona próxima al barrio de San Roque, aguas arriba del Sil. Sus características hacen de él el paraje idóneo para los baños en el río.

El lugar fue limpiado y desbrozada por el organismo responsable de cuenca hace escasas semanas. Aquí, los trabajadores se encontraron con un área recreativa que también es utilizada como playa fluvial totalmente cubierta por la vegetación, un estado de abandono que amenazaba con impedir su uso durante el verano. El alcalde, Avelino García, resaltó ayer el resultado final de ambos trabajos.

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