Manuel Jabois es el encargado del pregón en la Feira do Viño de Valdeorras. Ganador en el año 2003 del Premio Nacional de Periodismo Xulio Camba, el pontevedrés, un icono del madridismo, redactó la letra del himno de la Décima.
¿Qué supone?
Un orgullo y una felicidad muy grande, además de una responsabilidad. Y como todas las noticias felices, inesperada. Para cualquier gallego, Valdeorras es un signo de identidad, lo llevamos en las venas, en el ADN.
¿De qué va a ir?
Uf, llevo tres, cuatro días dándole vueltas. Quiero hablar de nuestra relación con el vino, de la vida diaria con él. El vino está en nuestras raíces culturales, en las sociales. Pero quiero hacer hincapié en la moderación, ya sabemos que muchas fiestas acaban como el rosario de la aurora.
¿Cuál es su relación con el vino? ¿Y con Valdeorras?
Diría con el vino de Valdeorras más bien. Mi relación con el vino es bastante maternal, de adolescente te estrenas con bebidas digamos duras. El vino es relación con la comida, una relación de amigos. No soy un experto, no soy ningún sommelier, pero el vino es disfrutar, el vino consigue detener el tiempo, ralentizar una conversación.
¿Qué le está resultando más difícil, este pregón o el himno de la Décima?
Jajaja, el pregón, por supuesto. Lo de la Décima no deja de ser una pasión infantil que salió solo, fue como un vómito emocional, el pregón hay que prepararlo mejor. Lo del madridismo es algo que mamé desde niño, esto es mucho más complejo, va dirigido a un público, y no a un público cualquiera. Eso conlleva una responsabilidad grande. Lo de la Décima no lo preparé, simplemente lo dejé salir. El pregón me está llevando mucho más tiempo, tiene mucho que abordar y tampoco quiero pasarme de listo.
Siempre se definió como un periodista de provincias, ¿ha cambiado mucho el Jabois que es un personaje tan importante en Madrid?
No me considero importante, si acaso he ampliado la mirada. Me gusta presumir de haber estado quince años en un periódico local. Cambia la repercusión, tanto si lo que escribes gusta como si te equivocas. Y me parece injusto.
¿Qué es más difícil, periodista o escritor?
Es difícil ser un gran escritor, yo no me lo considero, aunque es verdad que he escrito un buen número de novelas. Y cuando hablo de un gran escritor hablo de Dostoyevski, que trascendió a una época.
Entre todos los premios y libros, ¿cuál le hace más tilín?
Quizá el primero, el Xulio Camba, tenía veintitrés años y ganarlo fue un sueño. Porque me permitió descubrirlo y también pensar que quizá podía valer para esto. Me cambió el estilo, saber tener una distancia sobre las cosas.
A Jabois se le ha relacionado con mujeres digamos importantes, ¿cómo lo ha llevado?
Eso, se me ha relacionado. Con sorpresa. Ningún problema, no he entrado porque no tenía nada que decir, no pertenezco a ese mundo, me reía. Me relaciono con mucha gente.
La última, ¿cómo va el himno de la Vigésima?
Esperemos que sea lo más pronto posible, ojalá en seis años. Todos sabemos que la trayectoria de los últimos años del Madrid en Europa es irrepetible, igual tenemos que esperar un poco.
