Los robos cometidos en los últimos días en el rural de O Barco y Vilamartín, principalmente entre Viloira, Vales y Arnado, preocupan a los vecinos. Esta semana, los ladrones se llevaron un motocultor de la finca de José Blanco, quien comentó que también 'visitaron' el terreno colindante, de donde se llevaron una desbrozadora y una motosierra. Días antes, un vecino de Viloira colgaba en internet una petición de ayuda, intentando localizar a quienes le robaron un televisor, un amplificador y un generador de su finca, pero no le dolieron tanto las pérdidas materiales como la paliza que le dieron a su perro.
'Non se pode ter nada. A finca está pechada pero entraron, forzaron a porta da caseta e sacaron o motocultor polo fondo', explicó José Blanco. Poco después mostraba el lugar por el que accedieron al terreno colindante para robar la desbrozadora y la motosierra. Al mismo tiempo comentó que 'un ano me roubaron as cebolas, os tomates, todo'.
Unos metros antes de la citada caseta tiene su propiedad Fernando Núñez, quien se quejó agriamente de los robos 'A xente está que trina. Imos ter que tomar medidas', comentó. Recuerda cómo a un cuñado suyo, que instaló una caravana en esta zona, los ladrones 'entráronlle cando estaba durmindo alí', según dijo. Los vecinos también aluden a robos en Penouta o Arnado, donde se llevaron 'unha cuba de augardente'.
El enfado es general y los vecinos comienzan a mostrar su frustración pues, aunque los ladrones sean detenidos, el castigo casi nunca va más allá de la detención. De esta opinión es Manuel Rodríguez. Su propiedad fue visitada en la última Noite de Reis, junto con las de otros tres vecinos. 'A Guardia Civil colleu a uns coa motosierra que eu tiña marcada pero o caso se arquivou. Recibín un escrito dicindo que tiñan que haber sido collidos in fraganti'. dijo Rodríguez.
En otras ocasiones, si los detenidos son sorprendidos con objetos presumiblemente robados, pero que nadie denunció, son puestos en libertad inmediatamente, por lo que las fuerzas de seguridad insisten en la necesidad de denunciar.
Unos metros antes de la citada caseta tiene su propiedad Fernando Núñez, quien se quejó agriamente de los robos 'A xente está que trina. Imos ter que tomar medidas', comentó. Recuerda cómo a un cuñado suyo, que instaló una caravana en esta zona, los ladrones 'entráronlle cando estaba durmindo alí', según dijo. Los vecinos también aluden a robos en Penouta o Arnado, donde se llevaron 'unha cuba de augardente'.
El enfado es general y los vecinos comienzan a mostrar su frustración pues, aunque los ladrones sean detenidos, el castigo casi nunca va más allá de la detención. De esta opinión es Manuel Rodríguez. Su propiedad fue visitada en la última Noite de Reis, junto con las de otros tres vecinos. 'A Guardia Civil colleu a uns coa motosierra que eu tiña marcada pero o caso se arquivou. Recibín un escrito dicindo que tiñan que haber sido collidos in fraganti'. dijo Rodríguez.
En otras ocasiones, si los detenidos son sorprendidos con objetos presumiblemente robados, pero que nadie denunció, son puestos en libertad inmediatamente, por lo que las fuerzas de seguridad insisten en la necesidad de denunciar.
