Esta oposición ya fue comunicada a la administración educativa en dos escritos, enviados por el consello escolar y la Asociación Nacional de Padres de Alumnos (ANPA) del centro.
La comunidad educativa y el Concello de A Rúa rechazan los planes de la Consellería de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria que contemplan la supresión de una de las dos aulas de Infantil del colegio Manuel Respino. Esta oposición ya fue comunicada a la administración educativa en dos escritos, enviados por el consello escolar y la Asociación Nacional de Padres de Alumnos (ANPA) del centro.
Las cartas no son las únicas muestras de la oposición al cierre del aula que recibió Educación. Ayer, la alcaldesa del BNG, María González Albert, se entrevistó con la jefa territorial, María Mercedes Gallego Esperanza. En la reunión, le transmitió el malestar que generó el cierre del aula y la pérdida de la mitad de los profesores de apoyo. En los próximos días, la regidora contactará con los demás concellos afectados por la supresión de aulas para intentar acciones conjuntas.
María González explicó que la jefa territorial justificó la supresión del aula en que el colegio no superará la ratio de 25 alumnos que exige Educación. Solo tendrá 24, por lo que le faltarían dos para que la segunda continuase.
Los padres se oponen a la medida. Un miembro de la dirección del ANPA explicó que el argumento que le había ofrecido Educación aludía a un estudio acerca del descenso de la natalidad. En defensa de las dos clases, explican que las dimensiones de estas son muy reducidas, de apenas 50 metros cuadrados. Además, recuerdan que, el curso pasado, la Xunta ya suprimió una de las dos unidades de Primaria del centro educativo.
