Arropados por vecinos y empresarios de la comarca, los trabajadores de la mina se concentraron en la Plaza Mayor para posteriormente realizar una pequeña marcha por la calle de As Mazairas y la OU-533.
Si la situación no remite, Viana vería mermada su población y la capacidad económica de esta. “Isto aféctanos moitísimo porque temos un negocio de hostalería. Se a mina cerra, tanto os traballadores como as súas familias verían reducidos os seus ingresos o que nos afectaría directamente a todos”, explicaba Borja Monteagudo, propietario de una cervecería en el lugar.
Los vecinos vianeses se unieron a la premisa de defender este proyecto, “temos que defender os traballos que hai na zona e non debe pechar, sempre cumprindo cas medidas de preservación do medio ambiente”, señalaba Isabel González. “O peche da mina leva consigo a perda de moitos postos de traballo. Estas familias teñen que marchar a outro lado, e non deixarán os cartos no pobo. Perderase Viana e os seus pobos do redor”, quería dejar claro Juan Bembibre, también vecino del municipio vianés.
Los residentes en concellos limítrofes apoyaron también la marcha y se acercaron hasta la Plaza Mayor vianesa para solidarizarse con los trabajadores. “Estamos aquí para apoiar o concello veciño porque non podemos deixar que peche a mina”, explicaba Daniel Fernández, vecino del concello de Vilariño de Conso.
Y es que, si la unión hace la fuerza, los residentes de esta comarca del sureste ourensano lucharán hasta conseguir que se paralice esta decisión judicial.