La Confitería Miguel está en calle Bedoya, 1, y calle Ramón Puga, 44, Ourense
En este mes se cumplen 50 años desde la apertura de la Confitería Miguel, un lugar emblemático para disfrutar de sobremesas artesanales, hechas con dedicación y buena materia prima. Una filosofía de trabajo que iniciaron los fundadores, Miguel y Pilar, que, tras llegar desde Santiago para trabajar en la Confitería Ramos, que aún muchos recordarán, a lo largo de una década, se embarcaron en su propio proyecto. Con el paso de los años fueron sus hijas, María del Pilar y María Gloria, quienes tomaron el testigo de sus progenitores, y desde hace 30 años siguen al frente del establecimiento cuidando a sus clientes con los sabores más dulces. “Era inevitable. Desde siempre ayudamos en el obrador y crecimos entre tartas y cremas. Ese poso nunca se olvida”.
Entre sus especialidades se encuentran desde cañas fritas a lenguas de obispo, pasando por pastas, la clásica pastelería, bombonería, torrijas, leche frita… y todo ello sin olvidarnos de los postres estacionales: roscas de Reyes y Pascua, casitas y huevos de chocolate por Semana Santa, especialidades por San Valentín… pero siempre prevaleciendo “lo artesanal, lo tradicional, sabores que recuerden a los de siempre, que lleven a recordar la infancia a través del paladar”. Sensaciones únicas para momentos especiales.
