El COB llegará al inicio de liga habiendo encontrado a su líder en ataque (Justin Turner), sabiendo que tiene jugadores para ser sólido muchos minutos y a la vez limitaciones que le hacen bajar demasiado el nivel en otros. Con muchas dudas en la dirección, sobre todo con Sergio Llorente en pista, y un recurrente problema en tiro desde cualquier distancia. En el último partido de la pretemporada la diferencia durante muchos minutos fue el tiro exterior. Además, la indiscutible realidad de que está muy lejos de equipos con el potencial, el juego y la consistencia del Básquet Coruña. Como la semana pasada en el Pazo, fue a remolque tres cuartos y se descompuso en el último. Bajó los brazos en defensa y encajó un marcador que hace daño aunque sea en un partido amistoso. Los de Diego Epifanio van muy encina, pero 200 puntos encajados en dos partidos obligan a mirarse el ombligo a los de Félix Alonso.
Las pérdidas de balón lastraron al COB en un primer cuarto en el que fue de menos a más y en el que creció al ritmo que lo hizo Justin Turner. El norteamericano irrumpió en el partido y en la pretemporada con 8 puntos consecutivos (20-19). Le dieron a los de Félix Alonso para ajustar el marcador a cada arreón de los locales, pero siempre a remolque (24-19). Turner acabó con 26 puntos y siendo el único jugador de su equipo a la altura de partido.
El estirón de verdad llegó en el arranque del segundo cuarto. En dos minutos el parcial era de 8-0 y Félix Alonso tuvo que recuperar a titulares y pedir tiempo muerto para tratar de romper el ritmo de los locales (32-19). Y lo consiguió. Insuficiente para nivelar el marcador, pero sí para volver a igualar el juego. Con detalles de Turner de enorme calidad (14 puntos al descanso) y triples aislados de Karamo Jawara y Javi López (43-33), pero con porcentajes demasiado bajos para aspirar a algo más al descanso (45-37). El COB se fue al vestuario haciendo la goma lastrado por un pobre 3 de 13 en triples y un casi increíble 2 de 11 en tiros libres.
Arrancó bien el COB, se acercó a siete (51-44) y de golpe los locales volvieron a romper el partido con lo que realmente marca la diferencia en este deporte, la precisión. Dos triples y una canasta de Lundqvist rompieron el partido con un 8-0 (59-44).
Esta vez fue la segunda unidad la que dio el paso adelante. Con Peter-McNeilly atrás y el acierto adelante de Samu Rodríguez y Sergio Llorente el COB volvió a agarrarse al partido al final del tercer cuarto (71-61).
En el inicio del cuarto la diferencia estuvo en los bases. En los aciertos de Álex Hernández y en los errores de Sergio Llorente (80-63). Fue el desencadenante de un último cuarto sin nada que salvar, ni en ataque ni en defensa. Mal epílogo a un pretemporada demasiado irregular.
El próximo sábado llegará al Pazo el Castellón en el primer partido de liga. Quizá no sea el Básquet Coruña, pero el COB está todavía muy lejos de pensar en los rivales, antes tiene mucha casa que barrer.
