El COB tiene cada vez mejor pinta. Con bajas y con problemas físicos, pero sabe a lo que juega y lo hace muy bien. Al Melilla le ganó por equilibrio y calidad. Tomás Chapero sobresalió en las zonas y en el perímetro destacan todos. Pilepic y Gjuroski en el tiro, Willet se estrenó con 11 puntos sin forzar (dos mates de foto) y Williams es ya el líder. El base dio un recital en el último cuarto con 12 puntos y repartiendo asistencias. Ganó el partido él solito.
Guillermo Arenas no pudo contar un partido más con Seydou Aboubacar y prefirió no forzar a Augustas Peciukevicius, aunque las pruebas médicas descartan cualquier lesión grave y podría reaparecer el domingo en Ponferrada. Echó mucho de menos el COB el físico de los dos, sobre todo en defensa.
El primer cuarto confirmó lo visto en los últimos partidos de un COB equilibrado en ataque, pero con más problemas defensivos que en citas anteriores. Entre el tiro exterior de Gjuroski y Pilepic y lo que aprovechaba Chapero o atacaba el aro Williams, el equipo ourensano siempre se mantenía peleando por delantera en el marcador.
Atrás, peor. Algún mal balance defensivo para los de Guillermo Arenas y sobre todo demasiados rebotes concedidos en la zona. Tiene coartada el equipo cobista por las bajas de Aboubacar y Peciukevicius y más todavía sabiendo que falta un interior por llegar, pero 9 rebotes ofensivos del Melilla fueron demasiados.
Lo peor del COB en la primera mitad sirvió también para explicar todo lo bueno. Inferior físicamente y mejorable en defensa, se fue al descanso mandando (40-41) y los mejores minutos siempre fueron suyos.
El arranque del segundo cuarto lo lideró Kouadio. El “chaval” fue el mejor en intensidad y también en rendimiento. Reboteó, robó y atacó el aro con valentía. 6 puntos del tirón (25-27). El relevo fue de los “titulares”. Pilepic clavó 7 puntos sin fallo y Willet y Williams se divirtieron corriendo (31-37).
Chapero y Williams
Tras el descanso Chapero fue protagonista. Pilepic y Nogués lo encontraron con ventajas y el argentino fue haciendo granero para colocarse como máximo anotador (13 puntos) y mantener por delante a su equipo (50-54).
Le costó al COB en los cuatro últimos minutos y encajó un parcial de 7-0, más por fallón en el tiro que por otros deméritos, pero lo pagó yendo abajo al último cuarto (57-56).
El Melilla estiró la ventaja hasta los cinco puntos (65-60) y le dio la vuelta el COB con un Chapero enorme en defensa y Willet con dos canastones en ataque (65-68).
En los minutos decisivos asumió todo el peso Williams, primero con 8 puntos seguidos y el “amistoso” pasó a ser partido con la victoria en juego. Tiempo y pizarra de Arenas para mate de Chapero (77-78), dos faltas seguidas y Samu Rodríguez empata desde el tiro libre (78-78), otra pizarra cobista y canasta de líder de Williams (78-80), empató el partido Rakocevic desde el tiro libre (80-80) y lo sentenció Williams. Rompió la defensa y dejó solo a Gjuroski en el triple y robó un balón para sellar la victoria de un COB que gusta y tiene pinta de que también va a gustar.
