Derrota y alguna duda en el estreno de un COB que se quedó corto en el segundo partido consecutivo en el Pazo. Le faltó continuidad en el ensayo ante el Valladolid y puntos y consistencia en el debut ante el Gipuzkoa. Compitió, defendió bien y enseñó virtudes, pero no aguantó el nivel de un Gipuzkoa también fallón e irregular, pero con mucho más repertorio.
El COB estiró la goma de sus rotaciones y combinaciones todo lo que pudo, pero acabó quedándose sin ideas cuando jugó con la intendencia y sin defensa cuando puso más artillería. En el primer partido la manta dejó una preocupante sensación de ser demasiado corta.
Fue por delante en la primera mitad gracias a su defensa. Consiguió hacer jugar al Gipuzkoa a lo que no quería y sacó de carril a piezas clave como Jaworski y Delas. Incluso con un papel testimonial de Willet (por faltas) y sin tiro exterior llegó a tener 8 puntos de ventaja a un minuto del descanso (32-24). Mucho esfuerzo y poco premio minimizado por Jaworski en esos segundos finales 32-21. Fue el aviso de lo que venía tras el paso por vestuarios.
Segunda mitad
El partido cambió totalmente. En tres minutos el Gipuzkoa ya había subido una marcha al ritmo y también al acierto. De golpe el partido sí empezó a tener el nivel de la liga que se espera y al COB le costó seguir el ritmo. Aguantó hasta la mitad del cuarto (44-44), pero malvivió en lo que quedaba.
Por muchas combinaciones que intentó no logró Guillermo Arenas encontrar un quintero equilibrado.
Pilepic y Gjuroski botaron el balón más que lanzaron a canasta y ahí su peso en el juego se pierde. Sin ellos el ataque cobista se empezó a limitar a la capacidad de Willet para encontrar el camino al aro incluso con la defensa pertrechada y las canastas sueltas de sus compañeros que fuesen llegando. Pero cada ataque era ya picar piedra y el marcador empezó a estar cada vez más cuenta arriba ante un Gipuzkoa siempre con más argumentos (48-56).
Último cuarto
Un triple de Nogués fue el penúltimo achuchón del COB (53-56). Siempre teniendo que masticar los ataques hasta los últimos segundos de la posesión, sin poder anotar ni una sola canasta al contraataque y con piezas sin aportación ninguna. El COB se quedó corto también en los minutos clave.
Cuanto tuvo opción de meterse de verdad en el partido Chaz Williams no tuvo lucidez en la toma de decisiones, los tiros abiertos (siempre forzados) no entraron, Willet falló uno desde la esquina y el Gipuzkoa tiró de experiencia para asegurar la victoria.
Con un juego interior testimonial y muy poco tiro exterior el COB se quedó sin puntos para competir la primera victoria de la temporada. La duda es saber cuántos puntos más tiene en un partido con más acierto y qué es capaz de fichar para ayudar a los que ya están.
