A prisión una mujer por los incendios que cercaron Verín

Cuando todavía huele a quemado en Verín, Estrella R.P. (50 años), vecina de la localidad de Ábedes y trabajadora del servicio de limpieza en el Concello, ingresó a última hora de la tarde de ayer en la cárcel de Pereiro de Aguiar como presunta autora de la oleada de fuegos intencionados -al menos 10 focos diferentes- que cercaron ese concello el 3 y 4 de agosto y que pusieron en jaque a la población por su virulencia y cercanía a las casas. Ya había declarado en anteriores ocasiones en calidad de testigo ante los agentes, pero ayer lo hizo en calidad de investigada ante el juez. Desde comienzos de agosto, había sido señalada.

El Juzgado mixto de Verín número 1 acordó el encarcelamiento, previa petición de la fiscalía, en base a la investigación aportada por la Guardia Civil. Los agentes llegaron hasta la sospechosa en base el posicionamiento de su teléfono móvil en la franja temporal en que se detectaron las llamas. Así, el repetidor la sitúa en Cabreiroá-Sousas a las 14.55 horas, en donde comenzó a arder, el día 3 de agosto y así en los sucesivos focos. Al día siguiente, se detectó un pequeño foco en Tintores a las seis de la tarde y el terminal de Estrella aparece en ese lugar hasta una hora después.

En las diligencias también figuran declaraciones de testigos que aseguran que vieron a Estrella en lugares por los que no suelen transitar extraños.

El Peugeot 106 de color azulón que conduce no pasó desapercibido. Incluso hay algún testigo, al que le llamó la atención la conductora, una mujer con pelo ondulado, oscuro y media melena.

Tampoco convencieron a los investigadores las distintas versiones que dio la imputada, que, según fuentes cercanas al caso, “cayó en varias contradiccioness sobre con quién habló y estuvo los días de los hechos”.

Una decena de focos que no dejaron dormir a los vecinos del concello

Los incendios que se le atribuyen quedaron extinguidos el 10 de agosto, después de calcinar 785 hectáreas forestales e 148,39 agrarias. Comenzaron en Cabreiroá y en el barrio del San Antón, llegando a cercar casas y amenazar la fábrica Augas de Sousas. Mientras todos los medios trabajaban en la extinción, con la situación 2 declarada por la proximidad a las viviendas, se iniciaron varios focos simultáneos en las zonas de Caldeliñas y A Rasela, los que llegaron a cruzar al Concello de Vilardevós. Fue en Caldeliñas y A Rasela donde se inició el incendio forestal –hasta ese momento era urbano- y cogió fuerza. Las llamas afectaron a los núcleos de Vilela, Tintores, A Rasela, Caldeliñas, A Salgueira, Cabreiroá y Ábedes, además de la aldea de A Veiga das Meás, en el Concello de Vilardevós. El fuego se llevó por delante coches, invernaderos, monte e incluso algún cierre de viviendas.