Árboles caídos en carreteras, los desperfectos de la tormenta

Los daños provocados por las tormentas, que ayer emitieron casi 5.000 rayos en Galicia, continuaron por la noche y buena parte de la jornada de ayer.

En la zona de Carballiño y O Ribeiro, los bomberos fueron alertados a las 21,16 horas del miércoles por árboles caídos sobre carreteras en Coles, A Peroxa y San Amaro. Procedieron a cortar y retirar troncos y ramas de las calzadas, que recuperaron la ciruclación habitual. El Grupo de Emergencias Supramunicipal de Ribadavia también salió a retirar un cable del tendido eléctrico que tiró al suelo el fuerte viento.

En el concello de Maceda, las fuertes tormentas propiciaron la caída de un árbol, que causó daños en el firme, pero sin más daños adicionales ni heridos. Mientras, en la comarca de A Limia, se vio afectado el campo, especialmente en las plantaciones de patata y los campos de cereal.

Por su parte, los bomberos de la Mancomunidad Terra de Celanova acudieron a Verea para proteger una granja, ante el incendio que se había generado en las inmediaciones tras la caída de un rayo. En la Baixa Limia, se registraron caídas de árboles y de un poste de teléfono.

En As Conchas, los vecinos lamentaban ayer la rotura de una rama en la zona de la Alameda. No causó daños personales, pero critican que hace más de un año se instó a la empresa Naturgy -responsable de su mantenimiento- de la situación de abandono de la zona y la necesidad de llevar a cabo trabajos de tala. Este año, en junio, se les volvió a requerir y aludieron, según los vecinos, a falta de partida presupuestaria. Ante lo sucedido ayer, esta mañana la Asociación de Vecinos ha registrado un escrito en el Concello.

Por último, en Trives, además de varios daños materiales por ramas en la carretera, los vecinos de la localidad se quedaron sin conexión a internet y aún no se reestableció la conexión. Empresas y negocios de la zona no pudieron realizar ayer sus trabajos con normalidad.

Hasta 59 concellos ourensanos, en aviso por altas temperaturas

Hasta 59 concellos ourensanos están incluidos en el Plan de actuaciones frente a las altas temperaturas de la Xunta. Este programa tiene la función de señalar los niveles de aviso por episodio de calor.

Las altas temperaturas, según informa la Consellería de Sanidade, se deben a una masa de aire cálida de origen norteafricano y a la ausencia de viento. Ante esta situación, Sanidade recomienda beber más líquido del habitual, evitar comidas calientes, utilizar ropa de tejidos naturales y de colores claros y llevar calzado cómodo y que transpire. Además, indican que es importante ventilar los edificios, bajar las persianas durante el día y evitar la actividad física en las horas de más calor.