Arrancan las recuperaciones, el simulacro de vuelta al aula

Un centenar de institutos adapta gimnasios y salones de actos para los exámenes extraordinarios

mg_5119_resultado
mg_5119_resultado

Un centenar de centros educativos de la provincia enfrenta este martes el primer simulacro de la vuelta al aula con los exámenes extraordinarios, las pruebas de septiembre en la que participan alumnos de ESO y Bachillerato. El protocolo de adaptación a la pandemia que elaboró Educación incluyó medidas para favorecer la promoción del alumnado, por lo que los institutos esperan una baja participación en estas jornadas que servirán para probar las instalaciones que los institutos han tenido que reconvertir en aulas: salones de actos, bibliotecas y pabellones deportivos, listos para la primera prueba de fuego.

Elisa Rodríguez, directora del IES As Lagoas, explica: "Hemos determinado entradas y salidas diferentes, habrá que habilitar algún aula más y es posible que se movilice el horario para hacer más de un recreo". Hoy se examinan varios alumnos en el salón de actos del centro. "También utilizaremos la biblioteca para llevar allí alumnado". Los pasillos, aunque estrechos, ya están señalizados. "Va a ser complicado porque estos centros son muy viejos. De momento tenemos el mismo número de profesores y las guardias van a tener que ser más exhaustivas", añade Rodríguez. Prevén iniciativas en el ámbito digital y el emocional.

Daniel Lorenzo, director del IES Otero Pedrayo, que como As Lagoas supera los 700 alumnos, comenta que "tivemos carga de traballo importante no verán para acondicionar espazos. Fixemos unha aula nova e reformamos outras dúas", explica el director del centro.

El director del IES Eduardo Blanco Amor, Carlos Ferreiro, recuerda que "son pocos alumnos" en estas pruebas. Los chavales se repartirán en el polideportivo, donde están instaladas 80 mesas con la debida separación. "Al tener el protocolo de la Xunta desde hace unos meses ya hemos adelantado trabajo. Hemos adaptado aulas para reducir la ratio y ahora, prácticamente con un profesor más contratado, tendríamos solución para aumentar las guardias, especialmente en los recreos".

Los sindicatos convocan huelga para exigir más recursos docentes

Cerca de 30.000 escolares ourensanos, desde Infantil hasta Bachillerato, inician el próximo 10 de septiembre el curso escolar, una vuelta escalonada por edades en la que la Xunta apuesta por la "presencialidad" en todos los cursos educativos, con prioridad en Infantil. Los sindicatos–CIG, CCOO, STEG y CSIF–son reacios al protocolo y convocan huelga los días 10 y 16 de septiembre. Piden "medidas de seguridade e distanciamento físico", con medidas que incluyan "redución de rateos, o incremento de persoal docente e non docente, así como unha auténtica negociación do protocolo". También se han sumado los Colegios Oficiales de Enfermería, entre ellos de Ourense, a las críticas: exigen la figura del enfermero escolar.

Desde la Federación de Anpas Públicas de Ourense (FAPA) aluden al problema de la conciliación familiar. "El problema va a ser la conciliacion, muchos centros ya anuncian que no hay servicio de comedor, de atención temprana o extraescolares. ¿Qué hacemos con nuestros niños si tenemos que trabajar?", se pregunta Ángeles Vázquez, vicepresidenta de FAPA Ourense.

Contenido patrocinado

stats