Dos vecinos condenados por una pelea en Castro de Beiro

ENEMISTAD ENTRE VECINOS

Ambos vecinos mantenían una enemistad previa por sus propiedades

Publicado: 07 dic 2024 - 06:00 Actualizado: 07 dic 2024 - 18:02

Edificio en el que se ubica el Penal 1.
Edificio en el que se ubica el Penal 1.

Una pelea en O Lagar (Castro de Beiro) acabó con dos vecinos condenados. Manuel F.G. y Cándido F.F. se encontraron la tarde del 24 de marzo de 2023 y comenzaron una discusión. Durante la misma, Manuel agredió a Cándido en la frente con una azada que portaba y Cándido le propinó golpes en el costado.

Durante el juicio, ambos explicaron que existía entre ellos una enemistad previa. Manuel explicó que Cándido había colocado una puerta en un camino que consideraba público, por lo que lo puso en conocimiento de los vecinos. Por su parte, Cándido relató que tenía un problema con Manuel por una alambrada.

Manuel sostiene que él solo se intentaba proteger mientras Cándido trataba de darle una patada en los testículos

Ambos no coincidieron ni en el motivo por el que empezó la pelea. Manuel sostuvo que ese día se encontraba en su finca y reprochó a Candido el vertido de rastrojos, fue entonces cuando este le empezó a insultar llamándolo “hijo de puta” y lo amenazó diciéndole “voute matar, voute fender a cabeza”. Además, dijo que también entró en su finca y le dio una bofetada, por ello, él defiende que solo se protegió con el mango de la azada mientras Cándido le intentaba dar una patada en los testículos. Al respecto, cree que el golpe fue fruto de ese forcejeo y señala que durante el mismo Cándido le pegaba puñetazos en el costado.

Versión de Cándido

Por su parte, la versión de Cándido solo coincide en que Manuel le estaba recriminando que le echase rastrojos, algo que él defiende que no hizo. El resto es completamente distinto. Él señala que Manuel salió de su finca, levantó la azada, le dio con ella y después empezó a llamarlo “hijo de puta” y lo amenazó diciéndole que le iba a “fender la cabeza”. Tras el altercado, señala que él se fue a su casa a llamar a la ambulancia mientras Manuel se fue a arar. Además, aseguró que él no le pegó y que no le tiene miedo. Respecto a las lesiones de Manuel en el costado, aseguró que se las produjo unos días antes durante una discusión con otra persona por un hórreo.

Por estos hechos, la jueza del Penal 1 de Ourense, María Victoria Candamo, condenó a Manuel a la pena de un año de prisión por un delito de lesiones con instrumento peligroso. A Cándido le impone una multa de 360 euros por un delito leve de lesiones. Además, no podrán acercarse a menos de 150 metros del otro. Asimismo, absuelve a ambos del delito de amenazas, dadas las versiones contradictorias que proporcionaron y ante la falta de elementos corroboradores.

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