El Gobierno confirma que los trenes Avril no llegan este año

Lo que era un secreto a voces, y ya había avanzado este periódico, fue confirmado ayer por el Gobierno central. Los trenes Avril no llegarán a estar en circulación hasta el año que viene. La secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera, informó de que los Avril comprometidos por el Gobierno para llevar la alta velocidad al resto de ciudades gallegas y que permitirá a Ourense que aumenten las frecuencias y se abandone la actual saturación de los servicios “no van a llegar” en 2022, al acumular un retraso por parte de Talgo, que es el fabricante. “A este 2022 no van a llegar, efectivamente. Con toda la documentación y la homologación lo que he hecho es contrastar con la Agencia Estatal de Seguridad, que es la que tiene que dar los permisos, y haciendo los cálculos no llega. Esperemos que no se aleje mucho, unos meses”, destacó.

El problema viene de “la demora en construir los trenes”, aseguró Pardo de Vera, que dijo que están haciendo un “seguimiento” desde su departamento. “Es un prototipo inédito y requiere unas pruebas de seguridad que son las que son y hasta que Talgo cumpla no se va a aprobar”, manifestó, antes de incidir en que “si se hubiesen empezado a fabricar en 2017 y no se hubiesen tirado dos años y algo para empezar el problema no estaría en la homologación”, que es el proceso que se aborda ahora. El próximo 5 de octubre, según apuntó, está convocada una nueva reunión técnica y la secretaria de Estado ha subrayado que su compromiso es que los trenes estén “lo antes posible, en los próximos meses”, al margen de discusiones entre Talgo y Renfe.

Renfe espera como agua de mayo la recepción de los Avril, tanto los 15 normales como los 15 de rodadura variable. Todo apunta a que tendrá que esperar casi hasta mayo de 2023 para tener operativos los que circulen por la línea gallega, ya que en las previsiones de Talgo se señala el segundo trimestre del próximo año como fecha probable para la entrega de los que puedan circular por líneas de ancho ibérico. Para Galicia resultan imprescindibles, no solo pàra asegurar tiempos de viaje más cortos entre Madrid y Santiago, A Coruña y Vigo. También para aumentar el número de plazas en una línea que ya está al borde de la capacidad, como se demostró a lo largo del verano en el que durante muchos días se alcanzó el cien por cien de ocupación en los trenes que comunican Ourense con Madrid. Los Avril añadirán una media de dos mil plazas diarias por sentido y facilitarán la posibilidad de que Renfe introduzca algún servicio low cost a Galicia con su marca AVLO.

El PP pide licitar la obra de la intermodal

Los diputados de PP exigieron ayer al ADIF y al Ministerio de Transportes que cumpla con Ourense y se publique “urgentemente” la licitación de las obras pendientes en la estación intermodal de alta velocidad de Ourense. “Hoy comienza el otoño, faltan siete días para que finalice septiembre y seguimos esperando la publicación de la licitación”, lamentaba el diputado popular Celso Delgado. Este retraso se contrapone con lo que sucede en Santiago de Compostela, que pese a no tener alta velocidad ya tiene en construcción su nueva estación desde el pasado mes de enero y que ayer mismo recibían la visita de la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera. La pasada semana, en una visita a Ourense, la secretaria de Estado prometía que se licitaría “de inmediato” la obra en Ourense, pero todavía no se ha producido.