La mitad de los ourensanos, inmunizados en medio año

El 29 de diciembre de 2020 comenzaba en Ourense la vacunación contra el covid que permitiría poner fin a la pandemia que atraviesa el mundo. Los equipos de Enfermería se prepararon para este gran reto, llenos de nervios y de incertidumbre por lo que depararía el futuro. Seis meses después, ya pueden decir que completaron la pauta de más de la mitad de la población ourensana al superar la cifra de 150.000 personas inmunizadas. “É unha gran forma de acadar esta data”, reconoce Verónica Civeira, una de las coordinadoras.

Ayer se administraron más de 4.000 segundas dosis en personas mayores de 60 años, por lo que el área sanitaria logró completar la pauta de inmunización de más de la mitad de la población de la provincia. “Se nos poñemos a pensar todo o que fixemos nestes últimos seis meses, da algo de vértigo. Estamos contentos por todo o que logramos conseguir”, afirma Josefa Rodríguez Araújo, otra de las coordinadoras de la campaña. La fatiga de tantos días trabajando por y para la vacunación se nota, pero los buenos resultados de la campaña les hacen ser optimistas de cara a su fin: “A ver se para finais de setembro xa rematamos”, espera Civeira, con el deseo de que todos estos profesionales puedan regresar a sus puestos de trabajo con sus pacientes de cada día.

Inocencio Corbal fue el primero, marcando así un hito en la provincia y dando el pistoletazo de salida a una primera fase de la campaña que empezaba por los centros sociosanitarios, los más golpeados por la pandemia. “A compañeira que cargou esa primera vacina aínda recorda como lle temblaban as mans, iso xa quedou atrás”, cuenta Civeira. Dejando las dudas atrás, visitaron a más de 140 residencias de mayores y personas con dicapacidad, repartidas por todos los puntos de la provincia y con un gran volumen de usuarios, venciendo al reto de su dispersión demográfica. “Fomos solventando moita probas ao longo destes meses, polo que sentimos satisfacción ao ver que todo funcionou”, señala Rodríguez Araújo.

Mayores de 80 vacunados

Una vez que se terminaron las residencias sociosanitaria, se dio paso a la inmunización del personal sanitario y de los colectivos esenciales, pero había que pensar en los más vulnerables. A finales de febrero se empezó a inocular a los mayores de 80 años, un nuevo reto para los equipos de vacunación en Ourense por el evado volumen de personas en esta franja de edad y que vivían en zonas dispersas, por lo que los vacunaron en su centro de salud referente a nivel comarcal. “Prácticamente están o 100% vacinados ao igual que os inmobilizados”, apunta Civeira.

La vacuna resultó efectiva y la población respondió a la convocatoria, por lo que todos esos miedos y dudas quedaron atrás. “Viamos a fin moi lonxe, pero agora temos moitas ganas porque xa está máis preto”, asegura Civeira. Rodríguez Araújo se queda con la participación de la población, que “foi moi boa” y resalta que “todos teñen moitas ganas de vacinarse”.

Pese a los buenos datos y al ritmo de la vacunación, se preocupan por la evolución de la pandemia, que deja a los más jóvenes sin vacunar como los vulnerables ante el virus. “Antes preocupábannos os maiores e agora os máis novos. Os equipos son marabillosos e hai moi bo ambiente, polo que vacinarán para que ningúen quede sen a súa dose”, afirma Civeira.

Las residencias de mayores cumplen tres meses sin positivos

Mañana se cumplen tres meses desde que negativizaron los últimos residentes del centro Santa Mariña de Xinzo, que se contagiaron pese a estar vacunados. Desde aquel momento, la Consellería de Sanidade no volvió a notificar positivos entre usuarios de residencias sociosanitaria de la provincia, pese a la apertura progresiva y a que recuperaron el contacto físico con sus familiares tras meses de distancias de seguridad.

La vacuna cumplió con su misión al proteger a estas personas, las que peor vivieron la pandemia al estar aislados completamente en sus centros. Muchos terminaron contagiándose y una parte importante pasaron a integrar el trágico listado de fallecidos por culpa del virus. La inmunización permitió que recuperasen poco a poco su vida, saliendo de los centros y volviendo a las calles tras meses de encierro. “El éxito de las vacunas se ha demostrado y son el elemento central para poder fin a la pandemia”, afirma María Sande, asesora del comité clínico y jefa del servicio de la Medicina Preventiva del área sanitaria ourensana.

Las hospitalizaciones, que se han reducido considerablemente conforme mejoraban los datos epidemiológicos y se avanzaba en la campaña de vacunación, se mantienen en cifras bajas y con personas jóvenes ingresadas. El último mayor de 80 años que tuvo que ser ingresado se remonta al 13 de mayo. Desde aquella fecha ninguno ingresó en un hospital.