Ourense, inesperado filón para la arquitectura eficiente Passivhaus

Más espacios abiertos o semiabiertos, mejor ventilación y más luz son las principales peticiones de los propietarios tras pasar la cuarentena confinados. "Mucha gente no conocía su casa", dice la arquitecta María Pérez Oliver. El estado de alarma ha puesto en evidencia las carencias de las construcciones actuales y la necesidad de avanzar en el fomento de las políticas energéticas y el consumo cero. Y es ahí donde entra el Passivhaus, arquitectura eficiente y bioclimática que encuentra en Ourense un inesperado aliado del que beber -el uso de pizarra es una de las claves- y donde echar raíces por sus características naturales.

La posibilidad de no encender apenas la calefacción ni el aire acondicionado parece una utopía para muchos ourensanos, que consideran inviable esta opción atendiendo al clima: calor sofocante por el día en verano, con termómetros que rozan los 40 grados, y mínimas de hasta 12 grados en las noches. Sin embargo,las apariencias engañan, y el clima de Ourense es perfectamente compatible con las denominadas viviendas de consumo cero o de eficiencia energética.

"Es primordial para nosotros hacer un estudio a fondo de las características climatológicas de la zona concreta de la vivienda, ya que no es lo mismo la capital que una casa en la Ribeira Sacra. Eso nos ayuda a calcular las horas de confort que obtenemos simplemente por las condiciones naturales para, a partir de ahí, adaptar la construcción y lograr el máximo bienestar", indica Pablo López Prol, de PLP Atelier . En la misma línea se manifiesta Leonardo Llamas, de Edifico, que aclara: " Ourense no es Sevilla. Los picos de temperatura son altos por el día, pero por la noche puedes refrigerar. Gracias a eso se puede perder el calor por inercia térmica. Cuando una pared está muy caliente la casa tiene mucha energía porque se están llenando las baterías. Al bajar las temperaturas de noche, pierden ese calor lo que permite lograr el equilibrio para que al día siguiente comiencen de nuevo el ciclo".

Para Daniel López, de López y Noya, toda la provincia de Ourense supone claramente una oportunidad. "Aquí se pueden poner en práctica las estrategias pasivas y activas de arquitectura bioclimática, y se pueden usar materiales locales como las piedras (de diversos tipos) y las maderas. Además, de forma fundamental se puede actuar desde la rehabilitación, que es la construcción más sostenible que existe".

Porque construir no es la única opción y rehabilitar es la apuesta para muchos ourensanos. Las viviendas antiguas suponen una oportunidad para aplicar los nuevos conceptos arquitectónicos y mantener la esencia de las casas antiguas. Una de las asignaturas pendientes de la ciudad, con un casco histórico repleto de viviendas en completo estado de abandono.

El impulso del COVID-19

Reducir el consumo energético es uno de los deseos de los propietarios, que cada año ven cómo se incrementa la factura de la luz, y es también la apuesta de los arquitectos ourensanos de estudios como Edifico, López y Noya o PLP Atelier, que trabajan en la construcción de las viviendas del presente y del futuro. No en vano esta cuestión centró la reapertura de la actividad de Expourense, paralizada por la crisis del coronavirus hasta el pasado jueves día 18, cuando se celebró el XIV Simposio sobre Energías Renovables y Arquitectura Sostenible. Porque si hay algo que el confinamiento nos ha enseñado es que las casas tengan el mayor nivel de confort posible. Y si eso va ligado a una reducción "verde" de la factura energética, mejor.

PLP Atelier: “Hemos aprendido el valor especial de rehabilitar"

Pablo López Prol y Diego Rodríguez Val están detrás de PLP Atelier, un estudio que apuesta por las estrategias bioclimáticas y las energías renovables para aprovechar los recursos disponibles y reducir el consumo, no solo de electricidad, sino también de agua.

"La arquitectura depende mucho de la ubicación. Por eso, para nosotros es primordial realizar un análisis exhaustivo de la localización. Lo primero que hacemos es ir a Meteogalicia y buscar los datos de los niveles de humedad de los últimos años y las temperaturas. Es importante saber las horas de sol y la orientación del viento", indica López. Una metodología que aplicaron a uno de sus trabajos más destacados, la rehabilitación de una .

Rehabilitación de la casa en San Xoán de Río.

"Hemos aprendido el valor especial de rehabilitar. Tiene un componente sentimental, porque estás conservando la casa que fue de tus padres o abuelos y eso supone un extra", explican y apuntan a la oportunidad que supone esta práctica para aprovechar también los materiales. "En este caso mantuvimos la fachada de piedra, que nos ofrece inercia térmica. Sobre todo al final del día, cuando bajan las temperaturas, ya que permite que refresque. Todo el calor que se acumula durante las horas de sol, luego se suelta por la noche y así se mantiene la temperatura regulada", explican desde el estudio, que insiste en la importancia de contar con un buen aislamiento térmico."Es un aliado indispensable para mantener el confort interior".

En cuanto a la inversión que supone apostar por una vivienda sostenible, manifiestan que el coste puede ser "un 10 o un 15% más. En 7 años amortizas ese gasto porque vas a pagar menos en tarifas de agua y electricidad". Desde su punto de vista es indispensable concienciar a la gente para avanzar hacia este tipo de construcciones. "Poco a poco se tiene más conciencia, pero por ejemplo con Navarra, que es la comunidad de referencia, estamos muy atrasados. No solo en el desarrollo de normativa, si no en concebir que este tipo de construcciones ahorran a largo plazo. Al final trabajamos con dos cosas importantes, el consumo de energía primaria, es decir, lo que necesitas consumir, y lo que emites al medio ambiente. La gente quiere abaratar precios, pero es un deber reducir los consumos".

Aprovechar la lluvia

Una asignatura pendiente en Galicia, de acuerdo con López, es el aprovechamiento del agua. Algo que ya aplicaron en su proyecto de Parada de Sil, tras ganar el concurso de rehabilitación de una manzana de viviendas en el pueblo de Fondo de Vila con su propuesta "Ven Vindo". "Son cinco viviendas con cinco huertos, planteamos la recogida de aguas pluviales de forma que se recogen en la cubierta y se lleva a tanques instalados en la finca para aprovecharla en el regadío". Una técnica que también se puede hacer en obra nueva. "Para usar ese agua en la lavadora, por ejemplo", explica López.

Desde PLP Atelier dan un paso más y avanzan que el futuro pasa por la domótica, es decir, casas inteligentes informatizadas que se gestionan mediante apps móviles. "Puedes programar que se bajen las persianas o que se encienda la calefacción, lo que permite que reduzcas el consumo", explican.

Edifico: “Es más caro construir en convencional que en pasiva"

El método denominado Passivhaus llegó a Ourense en el 2016 de la mano del arquitecto Leonardo Llamas, que actualmente forma parte del estudio Edifico junto a Rubén Dominguez y María Pérez Oliver. Se trata de un centro especializado en edificios de consumo casi nulo. "Una vivienda Passivhaus apenas necesita energía y ofrece un alto confort interior. Cuenta con un sistema de ventilación mecánico que disminuye la concentración de ácaros, algo muy beneficioso para personas alérgicas o con asma ", explican.

Los cinco principios básicos de esta fórmula son el aislamiento térmico, ventanas y puertas de altas prestaciones, recuperación de calor por medio de ventilación mecánica, estanqueidad del edificio y ausencia de puentes térmicos. "Requieren un control absoluto en la construcción, ya que cualquier mínimo fallo altera el resultado", apuntan. Lo primordial en estas viviendas "24 horas", denominadas así porque son concebidas para tener el máximo confort todo el tiempo", es evitar los huecos para que no se produzcan filtraciones.

Los arquitectos conservaron la piedra de la planta baja

"Es más caro construir de forma convencional que con el sistema Passivhaus"; sentencia Lamas, que declara que los beneficios de decantarse por este tipo de proyectos se notan desde un primer momento.

Su trabajo se centra en la rehabilitación y construcción de edificios siguiendo este concepto, además de la divulgación en colegios profesionales y centros educativos. Una de sus obras en la provincia es la Casa Beluca, en Beade. "Está cerca de Ribadavia , se tiró abajo completa y conservamos los exteriores de piedra en la planta baja. En la de arriba, que antes era incremento de ladrillo, pusimos termoarcilla, mientras que para la estructura utilizamos madera mixta con acero. Los forjados son madera con hierro y las ventanas y los suelos también madera. En el baño se aprovechó una bandeja hidráulica que había", detallan.

Detalle de la Casa Beluca.

"Cuando te levantas por la mañana en una casa convencional y vas al baño notas el frío. Te duchas, vuelves a la habitación y de nuevo sientes la diferencia de temperatura. En una casa pasiva se mantiene todo el tiempo igual". En cuanto a qué materiales son los mejores para lograr el hermetismo de la construcción, tienen claro que la madera es la clave. "Junto a la piedra granítica, presente en la mayoría del terreno ourensano, y la pizarra", indican.

"El quid de la cuestión es lograr una vivienda completamente hermética, sin filtraciones. Para ello es fundamental colocar bien las ventanas. Suelen ser de doble o triple cristal y de madera o madera con PVC. El aluminio está obsoleto", recalcan. "Es imprescindible una ventilación mecánica controlada para recuperar el calor", explican desde el estudio, que consideran que la sociedad está concienciada de los beneficios de estas fórmulas, mientras que es una asignatura pendiente para las Administraciones.

López y Noya Arquitectura: “Hacer innecesaria la luz artificial es posible"

En López y Noya Arquitectura centran su estrategia en lograr el menor consumo posible en las viviendas, utilizando estrategias bioclimáticas pasivas. "Cuando hablamos de nueva construcción hay muchas decisiones que pueden favorecer el tener un menor impacto en el medioambiente", indica Daniel López, que añade: "Para ello optamos por el soleamiento, la iluminación y la elección de las ubicaciones muros-huecos, la ventilación y el aislamiento térmico".

El soleamiento consiste en elaborar una reorganización espacial que favorezca las ganancias térmicas en invierno y el refrescamiento en verano. " Lo que permite lograr también la máxima iluminación de los espacios mediante luz natural y hacer innecesaria la luz artificial". Así los huecos orientados al sur en las viviendas favorecen el calentamiento de los hogares de manera pasiva (sin aportes energéticos). Esto, acompañado de buenas estrategias de protección solar, sombreamiento en verano mediante aleros o contraventanas y la elección de vidrios bajo-emisivos, permiten evitar el sobrecalentamiento en verano. "Algo muy importante en Ourense", destaca López.

Imagen de obra nueva en vivienda unifamiliar

Otro punto clave está en la ventilación. "Resulta crucial, como en el caso del soleamiento. Ello pasa en gran medida por decisiones que no han de tener ningún coste añadido al cliente", indica López, que insiste en que "el diseño de la vivienda puede favorecer las ventilaciones cruzadas (norte-sur) las más efectivas para enfriar el ambiente e incluso ubicar estratégicamente elementos del diseño que favorezcan este efecto de refrescamiento, colocación de arbolado, fuentes y la más habitual si hablamos del entorno próximo a Ourense, una piscina".

Por supuesto, López destaca la importancia de un buen aislamiento "preferentemente por el exterior de los elementos principales de la fachada, ya que una vivienda con inercia térmica es siempre una vivienda más sostenible y eficiente. Esto hoy en día es ya imprescindible por la aplicación de las normativas de construcción", aclara.

En cuanto al coronavirus, desde López y Noya creen que reforzará la relación entre espacios interiores con los exteriores. "La sensación de estar fuera mientras estás en el interior. Esto se consigue abriendo grandes ventanales que relacionen espacios exteriores, tipo porches y terrazas con los espacios interiores como salones y cocinas".