Ourense nombra Hijo Predilecto al valdeorrés José Quiroga Suárez

"Soy uno de esos gallegos antiguos que nacían, merodeaban, ejercían y se morían en el mismo sitio”. Así se definía José Quiroga Suárez (Petín, 1920-A Rúa, 2006), médico rural y segundo expresidente de la Xunta preautonómica, que ayer recibió, a título póstumo, la distinción de Hijo Predilecto de la provincia de Ourense, a iniciativa de la Diputación.

El sonido de la gaita interpretando la “Marcha do Antergo Reino de Galicia” silenció a mediodía el salón de plenos del Pazo Provincial, donde la familia numerosa del político ourensano, que tuvo nueve hijos y 15 nietos, participó en este acto solemne copresidido por los presidentes de la Xunta, Alfonso Rueda; y de la Diputación, Manuel Baltar.

“É un dos grandes prohomes da autonomía galega e figura vital no desenvolvemento do autogoberno que acadou para Galicia catro décadas de benestar e progreso”, destacó Baltar, que recordó que Quiroga Suárez fue el encargado de defender ante el Senado el segundo Estatuto de Autonomía el 17 de marzo de 1981. “Pienso que haber tenido la gran ocasión de defender el Estatuto de Autonomía para Galicia, mi tierra, ante esta alta cámara y hacerlo como senador del reino y presidente de la Xunta de Galicia supone tan gran honor que, por sí solo, justifica una vida, aunque dentro de ella todo lo demás sea insignificante”, fueron las palabras del valdeorrés aquel día.

El encargado de la laudatio o alabanza al homenajeado fue Xosé Luis Barreiro Rivas, escritor, político, politólogo y profesor universitario, que presumió de su amistad con el nuevo hijo predilecto de la provincia y centró su elogio en una idea de Cicerón: Honor est praemium virtutis. “O honor que hoxe lle facemos é o premio da súa virtude, non lle damos nada, senón que simplemente vimos a recoñecerlle o que xa ten”, aseguró Barreiro, que lo definió como un hombre bueno, generoso, sencillo y honrado, y que formó parte de una generación “que non o soubo valorar en toda a súa profundidade”. Quiroga Suárez fundó el partido Acción Política Ourensana, junto a Eulogio Gómez Franqueira durante la transición, que se unió posteriormente al PP y luego a la UCD, de Adolfo Suárez.

El vicepresidente primero de la Diputación, Rosendo Fernández, que intervino en calidad de instructor del expediente de honor, señaló que el homenajeado fue un “médico por vocación y político por devoción”, y recordó que fue alcalde de Petín entre 1953 y 1956; médico en A Rúa durante 40 años; el senador más votado de Galicia en 1977, conselleiro de Sanidade de 1977 a 1979; y presidente preautonómico entre 1979 y 1982.

Un carácter dialogante

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, destacó la talla moral y política del ourensano, así como su carácter constructivo y dialogante, y su temple y responsabilidad en la transición a la democracia. “Un médico non mantén feridas abertas, nin abre novas feridas”, dijo el jefe del Gobierno gallego, que también señaló que este antecesor tuvo que trabajar por el autogobierno con “escasos recursos, pero con moita ilusión”.

En representación de la familia del homenajeado, habló uno de sus hijos, José Ramón Quiroga Gayoso, que dijo estar muy orgulloso y agradecido. “Nos enseñó la gran importancia que tiene la familia, y que la familia puede con casi todo”, afirmó. También indicó que su padre vivió la transición como “un no volver atrás y avanzar hacia la reconciliación” y que durante sus 40 años como médico rural “auscultaba la vida de los pacientes y les daba consejos que nada tenían que ver con la medicina”.

En el acto, en el que el solista de la Real Banda de Gaitas de la Diputación, Marco Foxo, interpretó un fragmento del “Concierto de Aranjuez”, de Joaquín Rodrigo, y el himno “Ourense no solpor”, también estuvieron presentes el presidente del Parlamento gallego, Miguel Santalices; la alcaldesa de Petín, Raquel Bautista; y el alcalde de A Rúa, Álvaro Fernández, entre otros representantes públicos.