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La empresa ourensana Maderas San Martín, ubicada en el Concello de Vilamarín, forma parte del panel de proveedores que participan en la emblemática obra de recuperación del llamado Cable Inglés, también conocido como muelle El Alquife, que se está ejecutando en la costa de Almería y que en estos momentos está ya en la fase final antes de su entrada en servicio.
La madera es un elemento clave en la ejecución del proyecto por su singularidad. Se trata de piezas de deck de madera de iroco de 200 milímetros de ancho y 75 milímetros de grosor, con un largo distinto en cada una de las piezas. Maderas San Martín aporta iroco, una madera tropical de variados usos, sobre todo suelos y estructuras.
La llegada de la empresa ourensana a participar en la obra almeriense se produjo después de un proceso de selección que duró casi dos años y en el que participaron empresas españolas y de otros países. Se optó por la compañía ourensana dada su experiencia en el tratamiento de este tipo de productos “y la calidad de su catálogo de obras”, subraya la firma ourensana.
“Esta era una obra para pocas empresas”, razona Lisardo González, propietario de la maderera. Explica que se trata de “una obra complicada porque las piezas son de diferentes medidas, lo que nos obliga a realizar un trabajo personalizado”. Pero, además, la dificultad estriba en la consecución de la materia prima: “El abastecimiento es muy difícil y encontrar en África una empresa seria que la suministre también es complejo, como lo es la consecución de contenedores para el transporte de este producto”, precisa Lizardo González.
En este momento existe un grave déficit de producción de madera, en especial de frondosas y tropicales, entre ellas el iroco. Tampoco resulta fácil “la consecución de contenedores para el transporte marítimo, al que se suma el colapso aduanero por parte de las autoridades de Camerún en el puerto marítimo de Douala”, según destaca.
La madera de iroco llega con un 80% de humedad y en la planta ourensana se produce el secado mediante un proceso que incorpora tecnología de vanguardia en la que San Martín es una referencia. Además de iroco, la empresa aporta también coníferas para otros elementos de la construcción. La firma ourensana hace secado al vacío, un proceso “único en la península”, como destaca González. Realiza control de humedad por scanner en continuo y el centro de mecanizado está totalmente automatizado.
San Martín, especializada en fabricación de pavimentos en maderas frondosas y tropicales de importación, dispone de dos aserraderos para cada una de las modalidades, cuatro secaderos convencionales y uno High Vac que suman una capacidad de secado de más de 25.000 metros cúbicos al año. Dispone de una fábrica de pavimentos de madera y cuenta con 80.000 metros cuadrados de instalaciones propias, además de depósitos logísticos en los principales puertos.
La restauración del Cable Inglés supone la recuperación de la zona del viejo cargadero de mineral de El Alquife como espacio de ocio, paseo y recreo. Fue declarado Bien de Interés Cultural de Andalucía. La Autoridad Portuaria de Almería promueve esta obra que está en su fase final y en la que se invierten 2,1 millones de euros.
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