La reprobación del alcalde divide a la oposición local

Se apruebe o no -dependerá del sentido del voto de los demás miembros de la oposición, PSdeG y Ourense en Común-, habrá pleno extraordinario para reprobar al alcalde popular de la ciudad, Jesús Vázquez.

Como adelantó La Región, el líder de Democracia Ourensana, Gonzalo Pérez Jácome, formalizará hoy ante el Registro del Consistorio, un cuarto de hora antes de que comparezca el gobierno municipal para informar de los asuntos acordados en su junta de los jueves, la petición del pleno extraordinario que tendrá, como único punto en el orden del día, la reprobación del regidor; porque, según Jácome, no presenta los presupuestos en tiempo y forma, cuando el PP, dice, criticaba eso en el mandato anterior; no consigue inversiones para la ciudad y no ejecuta los acuerdos plenarios en lo que a mociones aprobadas se refiere, como las comisiones de investigación pendientes de iniciarse.

Estos son parte de los argumentos del líder de DO, que serán estudiados por el PSOE antes de decidir si apoya la reprobación. Los votos socialistas sumarían la mayoría absoluta que permitiría ese acuerdo y Jácome cree que puede conseguir su apoyo porque el gobierno socialista anterior padeció hasta tres reprobaciones contra su alcalde y la entonces concejala de Urbanismo, por parte del PP.

Ourense en Común, con tres concejales en la Coporación municipal, se desmarcaba ayer en un comunicado público de la estrategia iniciada por Pérez Jácome y sus siete ediles, alegando que esa actitud "non avanza na mellora dos servizos municipais". Entiende OUenC que DO antepone "o beneficio partidista ás necesidades dos veciños", intentando generar una sensación de "ingobernabilidade" que cree un contexto propicio para una futura moción de censura.

Por ello, la "marea" insta a Jácome a plantear la reforma del reglamento municipal para hacer que las mociones sean vinculantes, en lugar de dejar de plantearlas en los plenos municipales, comenzando este mes por esa nueva estrategia.

En el PP, mientras, el alcalde, Jesús Vázquez, ha optado por el silencio frente a ese intento de reprobación. En su entorno sostienen que "sigue trabajando" por la ciudad, al margen de la táctica de DO. Pero tendrá que convocar el pleno en un máximo de 15 días.