Las residencias caninas de Ourense ya no tienen plazas para verano

Las residencias caninas de la ciudad cuelgan el cartel de completo hasta septiembre y lo hacen un año más de un servicio cada vez más demandado por el aumento de las mascotas en los hogares.

Las vacaciones de verano son sinónimo de viajes y planes, buscando huir de las elevadas temperaturas que caracterizan a la ciudad durante la época estival. En muchas ocasiones estas salidas no son compatibles con el cuidado de las mascotas, por lo que es necesario buscar dónde se pueden quedar bien atendidas durante varias semanas. Una de las opciones más recurridas es dejar a familiares o amigos al cuidado de los perros, pero esta alternativa no siempre es posible. Por ello, existen las residencias y hoteles caninos, que ofrecen gran variedad de servicios y todo tipo de actividades, además de alojamiento por las noches para que las mascotas se sientan como en casa en estos establecimientos.

En toda la provincia existen numerosas residencias y hoteles caninos, que cuentan con instalaciones adaptadas a las necesidades de los animales. Además, muchos de ellos ofrecen programas de adiestramiento y servicios de atención veterinaria durante las veinticuatro horas del día.

“Contamos con catorce plazas, que ahora mismo ya están cubiertas para los tres meses de verano. Hay gente que viene incluso de otras provincias, como Lugo o Vigo. Las estancias de la mayoría de los animales suelen ser de entre cuatro y quince días”, asegura Javier Vázquez, miembro del hotel canino Gardacan. Este hotel, situado en Coles, cuenta con una zona interior y otra exterior con jardín, en la que pueden realizar diferentes juegos y actividades. Además, tienen servicio de entrega y recogida de las mascotas a domicilio, alimentación, atención veterinaria y vigilancia durante toda la jornada.

El verano es época de desconectar de la rutina, hacer planes que durante el año no son posibles o viajar a otros lugares. En la mayor parte de las ocasiones, los animales no son bienvenidos, y buscar una alternativa para que ellos también disfruten de la vacaciones puede ser complicado.

Los hoteles y las residencias caninas son unas de las opciones más demandadas por los dueños de mascotas, que buscan que en sus días de relajación sus animales estén bien cuidados y atendidos. En toda la provincia abren, cada vez más, este tipo de alojamientos. A pesar de ello, durante la época estival se ven obligados a rechazar algunas reservas al tener todas sus plazas cubiertas. “Es imposible encontrar una residencia canina. He llamado a todas las que están en la provincia y están llenas, no tienen disponibilidad. He ido a otras provincias gallegas y están en la misma situación. A diferencia del resto del año, en verano están desbordados”, asegura María, usuaria de estos establecimientos.

De diez a treinta euros

Las tarifas van desde los diez hasta los treinta euros, en función de la duración de la estancia y el número de perros. Otra de las residencias que hay en la provincia es el club de campo O Meu Carón, en Punxín. Se caracteriza por ser un alojamiento sin jaulas. Los perros están libres, con zonas diferenciadas según el tamaño del animal. “Tenemos veinticinco plazas, es importante aportar más calidad que cantidad”, afirman desde la residencia O Meu Carón.