Año nuevo, técnico nuevo en Primera Futgal

El cierre del año trajo aparejado el fin de un ciclo en los banquillos del Polígono, Monterrei y Allariz, aunque todavía se desconocen los nombres de los que serán los sustitutos para lo que resta de la temporada.

En el cuadro industrial, uno de los equipos que esperaba repetir la buena campaña del año anterior, la marcha de Pablo Gil no fue una sorpresa, ya que el propio técnico lo tenía asumido, a pesar del respeto que tuvo en todo momento de la directiva presidida por Vicente Currás, que destaca que a día de hoy no tenemos cerrado al reemplazante y continuaremos en conversaciones para encontrarlo”. El Polígono es décimo con 22 puntos.

Otro de los aspirantes al ascenso, el Monterrei, terminó cesando al portugués Tiago Pona debido a los malos resultados, especialmente después de encadenar tres derrotas consecutivas antes del parón navideño y quedarse a seis puntos de los puestos de play off. El mandatario del club, Feliciano Romero, espera que en las próximas horas pueda llegar el nuevo inquilino del banquillo de Rozavales, “aunque no es una tarea sencilla”.

Los cuatro puntos sumados de los últimos 21 fue una de las razones que tomó el Allariz para comunicarle a Moncho Barge que no seguía en el club. El coordinador de fútbol, Miguel Ángel López, sostuvo que más allá de los resultados “que no están siendo buenos, es la sensación que trasmite el equipo y el juego que desarrolla. Se habló con los jugadores, el entrenador y en este caso se tomó quizás la decisión más fácil, pero no se sabe si la más acertada, que es un cambio de rumbo. Buscamos un prototipo de técnico distinto, alguien que puede aportar ideas que desde la directiva pensamos que hay que cambiar. Hemos hablado con varios entrenadores, algunos disponibles, otros no o no quieren entrenar. La ida que tenemos es poder cerrarlo ya, antes que acaben las fiestas y que para el día 2 de enero se conocieran la plantilla con el nuevo entrenador y empezar a trabajar”.

En lo que va de liga ya son seis los técnicos que no fueron capaces de culminar su labor.